24 febrero, 2010

LA BRUJA PEPA

He ido a ver a una bruja llamada simplemente Pepa. Tiene una cabaña en lo alto de una montaña emblemática de la región. Me ha dicho que puedo descansar tranquilamente mientras ella va a visitar los bosques para hablar con sus amistades, los duendes y duendecillos. Para ver al Gran Brujo que habita en la cueva cerca del río. Para ver a las hadas enigmáticas volando en dirección a las cabecitas de los niños que todavía creen. Pepa es muy vieja y su cabello parece un trenzado de raíces. Ha vivido siglos, demasiados. Me cuenta aquel instante en que fue consciente de sí misma y todo era bosque, animales salvajes, insectos y plantas. Su pasado quedaba oculto por nubarrones de indescriptibles pesadillas, pero a veces puede ver una luz intensa que surge de un reino preñado de inocencia. Pero me dice que descanse y que ya me contará.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Antes de enviar un comentario escríbelo primero en word para conservarlo en caso de que falle el envío. Trata de que no sea muy largo, pero si quieres escribir más entonces divídelo en más comentarios con el "sigue...etc". En caso de no poder enviar por cualquier razón no descrita entonces envíamelo a rbjoraas@telecable.es y yo me encargo de publicarlo.

REFLEXIONES EN TORNO A LA EXPERIENCIA DE FE PROTESTANTE

  U na experiencia subjetiva es algo inacesible a otras mentes. Lo que ocurre en el alma de las personas es un mundo en sí mismo refractario...