02 febrero, 2011

EL MISTERIO DE LA CRUZ

Piensa en una cruz. Piensa ahora en el punto de cruce entre la vertical y la horizontal. Es un punto. Abstráelo: un punto perfecto: la conjunción entre la horizontalidad del mundo material y la verticalidad del mundo mental o espiritual.

Ahora imagina el palo vertical (stipes) extendiéndose hasta el infinito. Y, de la misma manera, el palo horizontal (patibulum) se extiende también hasta el infinito.

Ahora imagínate todo el conjunto perfecto. Abstráelo hacia una absoluta perfección.

Ahora hazlo girar a una perfecta e infinita velocidad.

Y ahora un pequeño esfuerzo: eleva todo el conjunto a una cuarta dimensión.

En ese punto. Ese punto: ahí, ahí …..está la absoluta objetividad de la fe. Imposible destruir esa imagen. Imposible deshacerte de ella. Infinita, absoluta, eterna, indestructible, perfecta imagen de la fe.

Y no depende de tu subjetividad, no depende de tu esfuerzo mental, ni de ninguna alucinación o delirio o juego imaginativo. Te ha atrapado y aunque quieras desprenderte de ello jamás podrás. Aunque estés borracho o inconsciente ahí está porque no depende de ti. Si pierdes tu mente ahí seguirá.

Esa es la clave absoluta de la vida y de la muerte, del tiempo y del espacio. Vives en la fe.


(La Teología Salvaje de Nesalem. Tomo I, capítulo XXXII)


3 comentarios:

  1. El misterio es el hecho de que tengamos una consciència.

    Podríamos funcionar exactamente igual que funcionamos, pero como autómatas sin consciencia. Podríamos buscar el alimento o la reproducción siguiendo los mismos impulsos visuales u olfativos, los mismos cálculos y representaciones mentales, los mismos movimientos, los mismos gestos de expresión de sentimientos que otro autómata captaría como positivos o negativos y procesaría en su mente de autómata, pero sin experimentar ningún sentimiento, ninguna sensación, ninguna consciencia, ningún yo.

    Entonces, si puede concebirse que todo podría funcionar igualmente, si unos seres humanos autòmatas podrían, desde el punto de vista material, ejercer todas la funciones vitales que ejercemos nosotros (pero siendo como vegetales, sin consciencia) con un cerebro constituído por un ordenador que reproduce fielmente todas nuestras funciones cerebrales (incluso la función de escribir para influir sobre otros autómatas), la pregunta es: ¿Qué es la consciencia? ¿Qué funcion tiene?

    Los investigadores del cerebro podrían un día llegar a comprender toda la bioquímica y funcionamiento del cerebro, a explicar completamente este funcionamiento, incluso las bases bioquímicas de la consciencia. Pero no podrían explicar la consciencia en primera persona, explicar en qué consiste tener consciencia. Todos esos conocimientos científicos serían siempre en tercera persona.

    En definitiva: para mí el misterio más grande del Universo es: ¿QUÉ ES LA CONSCIENCIA? ¿Podría algún dia un autómata artificial tener consciencia?

    Runand

    ResponderEliminar
  2. ¿Quién es, en nuestro interior, el que experimenta dolor? ¿Quien experimenta gozo o alegría? ¿Quién "ve" el mundo y las cosas? ¿Quién siente agrado o desagrado ante los seres y las cosas?

    ¿Quién es el yo? ¿Por qué en el mundo tiene que existir algo como la consciencia, cuando no es estrictamente necesario para nada?
    (Bueno, en realidad, nada de lo que hay en el mundo es necesario para nada. Todo existe porque sí, comenzando por el mismo Universo. ¿Por qué tiene que ser necesario que exista un Universo? Podría no existir nada y no pasaría nada).

    Runand

    ResponderEliminar
  3. Buena reflexión Sr. Runand. Dedicaré algún epígrafe al tema.

    ResponderEliminar

Antes de enviar un comentario escríbelo primero en word para conservarlo en caso de que falle el envío. Trata de que no sea muy largo, pero si quieres escribir más entonces divídelo en más comentarios con el "sigue...etc". En caso de no poder enviar por cualquier razón no descrita entonces envíamelo a rbjoraas@telecable.es y yo me encargo de publicarlo.

LA INCREIBLE PREGUNTA SOBRE DIOS

 Poco a poco vas buscando a Dios y vas agotando sin remedio. Dios es una palabra que no lleva a ningún sitio concreto, solo a infinitas espe...