La podemos imaginar. La imaginación al poder en forma de
botella de sidra. ¿Pero cómo materializar lo que existe en la imaginación? He
ahí la cuestión. Mi botella de sidra perfecta e inmaculada existe
en mi mundo particular, la veo, la palpo con mis fantasmas; pero no puedo materializarla para que ustedes la vean en su perfección. En fin, esta botella de sidra que domina ya mi imaginación no puedo compartirla con ustedes, no puedo escanciarla con ustedes. Pero millones de fantasmas están ya disfrutando de ella en mi mundo mental, en mi dimensión espiritual. Los veo escanciando como locos y disfrutando de la sidra perfecta que nunca se agota y que siempre coloca. ¡¡Aggh!! Se está produciendo una gran espicha entre arquetipos inmateriales. Una pasada. Ahora se han puesto a tocar una gaita holográfica y el tambor retumba como el demonio.
en mi mundo particular, la veo, la palpo con mis fantasmas; pero no puedo materializarla para que ustedes la vean en su perfección. En fin, esta botella de sidra que domina ya mi imaginación no puedo compartirla con ustedes, no puedo escanciarla con ustedes. Pero millones de fantasmas están ya disfrutando de ella en mi mundo mental, en mi dimensión espiritual. Los veo escanciando como locos y disfrutando de la sidra perfecta que nunca se agota y que siempre coloca. ¡¡Aggh!! Se está produciendo una gran espicha entre arquetipos inmateriales. Una pasada. Ahora se han puesto a tocar una gaita holográfica y el tambor retumba como el demonio.
Señores, comprendan la absurda y absoluta imposibilidad de
compartir con ustedes lo mejor que yo puedo imaginar. Yo quisiera conquistar el
mundo con mi botella de sidra perfecta, pero entre mi imaginación y el mundo
material hay una absoluta discontinuidad. Jamás podrá ser posible la perfecta
materialización de mi poderosa botella de sidra. Por tanto, les invito a Casa Pin a tomar
unas botellas de sidra reales con huevos cocidos y lacón. Casa Pin, la sidra
que mejor se aproxima a la perfección.
Pues no sé si una botella de sidra podrá conquistar el mundo, pero el botellón se está llevando a buena parte de la juventud por delante sin duda alguna.
ResponderEliminarHabla usted de lo mejor de nuestras tradiciones: beber vino, sidra o cerveza (con moderación) al tiempo que se come algo sustancioso. Hermosa tradición perdida entre muchos de nuestros jóvenes, que hace lustros se pasaron al botellón , verdadera arma de destrucción masiva de neuronas.
ResponderEliminarMi botella de sidra perfecta se ha deslizado y transformado en un "botellón" de mezclas impuras y destructivas. De la bebida "pura" y sana del "pueblo" hemos pasado a la contaminación de lo espurio, de lo "extranjero" (la Coca Cola) y otras mezclas malsanas.
ResponderEliminarBien es verdad que me había olvidado del poder del Mal y del Maligno. Y de la vulnerabilidad de nuestra "sana y vigorosa" juventud a los poderes malignos del Tentador.
Oh sidra! Tú, como Cristo...
ResponderEliminarPedrosa Latas
UN RELATO DE PROPINA
ResponderEliminarEl Señor Centrópetum tenía los sentidos atrofiados, hechos fosfatina de tanto aburrirse. Los tenía también muy agotados por haber luchado sin cuartel en la vida. Así que entre disgustos, conflictos y posterior aburrimiento y abulia por el hecho de existir, los sentidos del Señor Centrópetum ya no podían disfrutar nada, casi nada. Y menos una botella de sidra. Con los nervios y los sentidos destrozados ya nada hace tilín. El aguante lo tenía bajo mínimos y cuando alguien a su alrededor decía alguna parida, pues el Sr. Centrópetum se sentía herido y vapuleado en lo más profundo de sus vísceras.
Como ese era ya su estado permanente de contacto con la vida, pues decidió escribir su filosofía particular. La llamó la filosofía de la irritabilidad o irritalogía. Se basaba tal filosofía en entender la vida como puro fastidio, irreparable aburrimiento, absoluta insipidez o intratabilidad en la relación con los semejantes. Pero también la alergia a los paisajes que la gente común considera "bellos"; la eczema que produce la política; los picores insoportables a sufrir cuando se pasea, etc, etc, etc.
El Señor Centrópetum llegó a desarrollar continuos vómitos por el sólo hecho de reconocer su vil existencia en este mundo. Los llamaba "vómitos existenciales". Al cabo de unos años fundó comunidades irritalógicas por todo el país, aunque más tarde se extendieron por todo el mundo. Los irritólogos han llegado a ser millones. Su vida es triste, apática, irritable en extremos, insociable, intratable, malhumorada; además de las alergias que padecen por el sólo hecho de vivir.
La sidra, por buena que sea, no deja de ser una bebida rústica y vil, sin finura ni elaboración. Sobre todo la natural. Yo, la verdad, prefiero la sidra achampanada de las fábricas de Villaviciosa y Gijón.
ResponderEliminarAhora bien, donde esté un buen vino tinto, con cuerpo y madera, con esa riqueza de matices al paladar, ls rústica, sencilla e inocente sidra no tiene nada que hacer.
LEEMOS EN EL "TRATADO DE IRRITALOGÍA" DEL SR. CENTRÓPETUM:
ResponderEliminar"En realidad nuestra existencia es tan espectral como la de cualquier fantasma. Daros cuenta que no somos más que hologramas de energía en composición, disolución, recomposición, etc. Nos tomamos el mundo como algo dado, cosificado, "duro"; pero eso no es más que otra alucinación. Le podríamos llamar la "alucinación que nos pretende situar en la realidad", pero que no es más que una alucinación común a cierta frecuencia de la mente humana. Nos movemos en esa frecuencia por necesidades de equilibrio y de relación de fuerzas, pero es una maldita ilusión instalada ahí por algo que necesita mantenernos así, en esa frecuencia; en ESE PUNTO DE VISTA COMÚN.
"Los gnósticos creían que este universo es producto de un demiurgo malvado que juega con sus criaturas para esclavizarlas y hacerles daño sin parar. El sufrimiento humano es placer intenso para ese demiurgo poderoso que no cesa en inventar perversidades a cual más insidiosa. Fijaros en la Historia. ¡Qué historia! La sangre no para de correr; las injusticias siguen gobernando el mundo. Hay millones y millones de toneladas de sufrimiento. Nos colocan espejismos en forma de esperanzas e ilusiones y algún triunfo parcial; los justos para seguir tirando y perviviendo como esclavos y no desesperar. Pero todo está ahí contenido en forma de hologramas, de espectros de energía. Nos movemos entre el cielo y el infierno sin llegar jamás a ninguno de los dos.
Pero darse cuenta de nuestra existencia "holográmica" es el primer paso para pasar a otras dimensiones de relación de fuerzas y energías." (Capítulo XI, p. 16)
Muy cortos son los capítulos de Centrópetum. Observo que en la página 16 de su libro, va ya por el capítulo XI. Con tan breves capítulos, el desarrollo de las ideas debe resultar penosamente insuficiente. La irritalogía o irritismo debe ser un sidtems filosófico harto precario.
ResponderEliminarPedrosa Latas
"Nada escapa a la inestabilidad." Dijo un profeta.
ResponderEliminar"Nada escapa a la locura", dijo otro profeta.
ResponderEliminarLa sidra perfecta; la botella de sidra perfecta. Qué placer estético poder contemplar una botella perfecta de sidra perfecta. Una botella aislada del universo en su absoluta singularidad. En su absoluta estructura. Plena estructura. Nada ausente, todo en su transparencia. Eterno arquetipo, o infinitud de composición. Paz mental. Mi meditación ha de ser una botella de sidra ideal. ¿Quién dijo que Platón está passé? Hay un mundo de arquetipos ideales, perfectos. Pleroma. Descanso eterno en ese mundo ideal de eternidad.
ResponderEliminarSi nuestro espíritu es capaz de intuir esos arquetipos, entonces también podemos trascender la materialidad partiendo de nuestra alma. ¡¡¡He ahí lo sublime tras las engañosas apariencias!!! Qué rica experiencia estética!!!
El mal se disuelve en esa plenitud de silencios armónicos, de luz en sus esencias y tonalidades. La imaginación libre. Entre paisajes infinitos de esencias que viven su absoluta libertada. ¿Dónde ha quedado el mundo vil de la materia? ¿Dónde? Los recuerdos van desapareciendo...... ¿¿ugggg?? Where are you Mr. Dream? Who are you, sir? Welcome to the Beyond. Let's put the show on the road!
ResponderEliminarImposible jamás ver ninguna plenitud. Siempre será la intuición. Pero si llegáramos a "ver" la plenitud sería el silencio absoluto, sería el "no ver" absoluto: o sea, la nada.
ResponderEliminarPor tanto, mejor que esa botella de sidra perfecta quede sin beber. Quede ahí sugiriendo la plenitud de un culín que jamás llegaremos a escanciar ni beber.
ResponderEliminarD-ós no pudo revelarse en la palabra ya que la palabra es siempre imperfecta. La Palabra tan solo apunta a lo que jamás podremos aprehender.
ResponderEliminarNos movemos en ese espectro que va desde los Arquetipos e ideas de Platón, hasta la nada Heideggeriana o Sartriana. Es una botella de sidra esquiva y espectral después de todo. Ese es el juego (o la pesadilla) de la existencia.
ResponderEliminar¿Quién es el intérprete que ha de interpretar al intérprete? ¿Quién es el intérprete final que haya llegado al fondo prístino de la Verdad Revelada? Pero si ese Intérprete Final ha llegado a la Verdad Revelada entonces jamás podremos entender a dicho Intérprete desde nuestra condición de imperfección. Y tal Intérprete se nos desvanecería de la existencia.
ResponderEliminarRobert M. Price dice:
" Lutero quería canonizar la intención del autor (suponiendo que se pudiera recuperar), el "sentido llano" del texto", como el significado mayoritario y "oficial", porque quería diferenciarse de la Iglesia Católica. Los católicos llevaban mucho tiempo recurriendo a exégesis figurativas y alegóricas para dar una base escrita a sus dogmas gratuitos. Lo que Lutero odiaba de una interpretación tan creativa y figurada era su carácter INCONTROLABLE. No podías obligar a alguien con la letra de la ley si los lectores del texto podían usarlo como una carta del Tarot o una mancha de Rorschach para catalizar nuevos y propios significados."
"Obsérvese la ironía inconsciente de los fundamentalistas protestantes: creen que tienen la respuesta a toda pregunta en una Libro infalible, cuyo significado discuten continuamente sus exégetas. ¿Qué tiene de bueno un libro infalible si no se sabe qué SIGNIFICA? Y así son todos los libros, todos los textos, y por eso nunca puede haber un LIBRO AUTORIZADO. Porque la intención del "autor", el significado del "autor", el sentido aparente del "autor", nunca puede controlar la lectura del texto."
(Robert M. Price en su prólogo al "The Necronomicon". Hay traducción al castellano en La Factoría de las Ideas,.Madrid 2002.)
Obsérvese la narrativa de Henry James en "The Turn of the Screw" (La otra vuelta de tuerca). ¿Cuál es la intención del autor en tal cuento de terror? James se puso a escribir, pero la historia en sí le arrebata como si fuera uno de esos fantasmas de la narrativa y ahora es la historia quien le lleva, quien le va imponiendo y condicionando el lenguaje hasta el "final". Quien tenga la oportunidad de leer una buena edición crítica (Norton, por ejemplo), verá la multitud de interpretaciones todas ellas jugando con el texto que jamás tiene fondo y jamás se deja fijar o controlar en una sola interpretación. Cada lector es una interpretación, una lectura. Cada lector es "otra vuelta de tuerca" de la historia.
ResponderEliminarSé que estas cosas exasperan a muchos. La gente quiere un CENTRO, un DOS Y DOS SON CUATRO, una simplificación de las cosas.
De acuerdo: todo se puede simplificar, pero en el proceso nos vamos también empobreciendo y limitando
Muchos protestantes no son conscientes de lo que significó la Reforma en cuanto a la ruptura con un magisterio de la Iglesia Católica que circunscribía el texto canónico a una sola Interpretación Oficial. La Reforma libera el texto para entregarlo a los fieles, a la conciencia individual --que es el así mismo liberada de la tutela del clero, de la Jerarquía--; para ejercer responsabilidad interpretativa. En última instancia es la conciencia individual la responsable de sus actos interpretativos. Efectivamente, no fue en un principio así; Lutero, Calvino, etc., quisieron desde el primer momento ejercer control de las interpretaciones en referencia a un Texto Objetivo que supuestamente subyacía en la Biblia y que habría que desvelar y que se dejaría desvelar.
ResponderEliminarPero los "controles" y las instituciones ya no podían evitar que las interpretaciones se diseminaran de una y mil maneras. El sujeto individual pasaba a ser el referente "final" de tales interpretaciones. La búsqueda de una interpretación objetiva derivó en lo inevitable: la creatividad interpretativa. Muchos protestantes prefieren seguir creyendo que el Canon es un Texto Objetivable que ha de alcanzar "una realidad subyacente" y entonces sigue habiendo herejes y ortodoxos. Pero las ortodoxias se multiplican, las interpretaciones no pueden ser apresadas, controladas, contenidas. Estamos en una sociedad civil democrática, en el fondo FRUTO DE LA REFORMA!!.
Y muchos protestantes se sienten mal en este "caos" y quisieran todo bajo control de su denominación o iglesia o diferentes confesiones o catecismos; pero no se dan cuenta que precisamente ese "caos" bajo una LEY CIVIL que permita ejercer tal riqueza interpretativa y responsabilidad es la mejor contribución a la libertad que ha hecho la Reforma (e indirectamente el evangelio).
Las iglesias han de ser asambleas de creyentes que actúan en su libertad y responsabilidad. Nadie está forzado a pertenecer a ninguna iglesia local, pero si pertenece a una X o Y ha de ser plenamente responsable ante esa iglesia local en cuanto a conducta y disciplina. Esa es la riqueza de la Reforma y su libertad. Muchos protestantes desearían ser católicos, y algunos lo son en el fondo de su alma, en cuanto a imposición de doctrina y jerarquía y autoridad. Pero pierden la esencia del cristianismo evangélico.