Groman está desayunando. La taberna está destartalada y una mujer vieja canta con la voz fina como el humo. Groman come su salchicha acompañada de largos tragos de cerveza. La vieja sigue cantando algo que parece provenir de abyectas oscuridades. Lejos de allí todo acontece como si el orden del mundo se hubiese desquiciado. Groman da una voz y al momento Grierta se presenta con una servilleta que envuelve una barra de pan recién salida del horno. La vieja deja salir un aullido y se queda con la boca abierta: las encías desnudas, sin dientes, y el aullido parece convocar a infernales seres de ultratumba. La taberna está aislada. No se ven casas cerca, ni tampoco atisbos de que haya un pueblo o ciudad en las cercanías.
Venimos de lejos y nos encaminamos hacia una taberna. De lejos y huyendo, siempre huyendo. Escapando.
Groman ha acabado definitivamente con su salchicha y ahora parte otro trozo de pan. Nuevos tragos de cerveza hacen bajar el pan al estómago. Un gran estómago voluminoso. Quizás descomunal. Y ahora la vieja se levanta de la banqueta y parece estirarse sin límite. Casi pega contra el techo de la taberna. "Vienen" grita ", "¡vienen!" Grierta se pone a bailar sorteando trastos, cajas vacías, botellas medio llenas o medio vacías. Aparta telarañas y comienza a girar como una peonza. La música parece salir de su imaginación.
Nos acercamos. Nos acercamos a la taberna. De esa lejanía de donde venimos solo percibimos trozos y trazos de un mundo sumido en conexiones y desconexiones, circuitos y cortocircuitos. Recordamos el cuadro completo de una ciudad vista desde una montaña cercana y he ahí su fragmentación y descomposición. Pero no, no procedíamos exactamente de esa ciudad, sino de un territorio mucho más lejano. Tan solo pasamos por clla como por otras muchas. Pueblos. Gentes. Voces. Palabras sin significado. Solo ruido de articulaciones. Hemos entrado y salido muchas veces. Tenmos hambre y estamos confusos. Fatiga. Cansancio. Hastío.
La taberna abre sus puertas a los nuevos peregrinos. Groman no puede soportar su barriga y se cae de bruces. La vieja ahora se agacha como un reptil y abre la puerta para dejar entrar la extraña manada que llega de tan lejos. Se ríe. Grierta sale al porche y eleva las manos para dar la bienvenida a quienes vienen de lo desconocido.
JERUSALEM HAS AWAKEN
ResponderEliminarDon't ever think everything is explained
Or in the process of been explained
Wake up at new ways of grasping new dimensions
You've never thought they were there.
Changing your perception is not everybody's gift
But somehow it shows up in mysterious ways
And suddenly you cry "what's wrong with me?"
Nothing is wrong my friend
It's just you didn't know who you were
And now you're waking up at a new light
Under strange clouds.
Don't be afraid, my friend
I keep loving you, no matter how far you are from me
Far, far away in the new earth and the new heavens
Jerusalem has awaken
And we're all near and far at the same time.
LAS PALABRAS PERDIDAS DE UN MENSAJE FLOTANTE
ResponderEliminarNos hemos metido en la colmena. Hemos entrado con facilidad, pero ahora no encontramos la salida. Hay túneles y galerías por donde pulula mucha gente. A veces desembocamos en grandes plazas donde los niños juegan bajo la mirada de sus vigilantes. Si miramos hacia arriba podemos contemplar una bóveda que imita un cielo real, pero sus brillos traicionan la realidad. Hay gente trabajando en amplias estancias que parecen talleres o fábricas, pero si nos fijamos un poco todo parece ser un juego de hologramas, de imitaciones; y si entramos todo desaparece a nuestra vista, dejándonos en la confusión de una semioscuridad que no somos capaces de despejar. La colmena nos ha seducido. No había motivo por el que entrar. Fue simplemente la curiosidad. Creíamos que era otro nuevo centro comercial. Pero nuestros sentidos van perdiendo percepción y sensación. Es cómodo y agradable sentirse despojado del cuerpo y sus limitaciones. Pero tampoco estamos seguros de que sea eso lo que nos está sucediendo. Estamos asustados. Tenemos miedo. Y esas sensaciones son reales. Vivimos nuestro interior, pero estamos entumecidos con el mundo exterior. Adormecidos hacia afuera, pero expansivos hacia nuestras interioridades. La colmena ha atrapado cuerpos y almas. Los cuerpos los desecha, pero las almas las expande hacia dimensiones oníricas. Pero tampoco es exactamente eso. Los pensamientos parecen relantizarse. Sentimos las palabras una a una y nos produce un suave placer anímico. Hay focos de intensidad. Nos atraen como fuerzas gravitatorias. Todo se ha transmutado en un espectro de luces mezcladas, indefinidas. Todo ello nos sume en una confusión. No podemos desaparecer de esta manera y en el puro olvido, sin testigos que puedan hablar de nosotros y de nuestro extraño destino. Pero he ahí una luz clara, definida, nítida. No hemos perdido nuestra identidad, ni nuestro nombre. Entramos en este gran foco de luz ....
VIDA ATEA
ResponderEliminarNo es lo mismo reflejarte ante un universo de leyes físicas inhumanas e indiferentes al sufrimiento o las pasiones del ser humano; que reflejarte ante un Dios vivo. En el primer caso ya sabemos cómo acaba todo. Muerte. La nada. La vida humana individual acaba con la muerte. La indiferencia absoluta una vez extinguida la memoria de los que nos conocieron. O si alguien es famoso, hasta que el tiempo vaya relegando todo al olvido o la indiferencia. Pero esa memoria ya no nos afecta. La vida individual sería como una chispa que se enciende y se apaga sin pena ni gloria. De la nada a la nada. Pero luego, la vida en sí de esa chispa efímera es una vida inestable, insegura, siempre en conflicto o relación de fuerza con los demás, o relaciones afectivas de mayor o menor confianza, hostilidad, violencia, convivencia; amor, odio, indiferencia, hastío, dominio, servidumbre; placeres y satisfacciones ocasionales y dolor o desasosiego más persistentes. Comprobamos también que lo malo suele triunfar sobre lo bueno y además de forma avasalladora y arrogante. Tanto a niveles individuales como sociales.
Bien. Si es así, el mundo no tiene fundamentos ni principios éticos que ofrecerte para vivir. Le es absolutamente indiferente la forma que hayas de vivir. Puedes ser un explotador sin escrúpulos, un impresentable, un ignorante malvado; o puedes ser un esclavo, una víctima sin salida, una persona inocente o noble, inteligente y sabia. Normalmente los espectros de la gente normal se mueven de uno a otro polo en zonas intermedias. Salvo cuando surge una crisis. Entonces las cosas se polarizan. Se intensifican, se pervierten. Los principios éticos pasan a ser relativos a las circunstancias o la necesidad.
Y esa es la vida bajo una cosmovisión o paradigma monista, atea, materialista, historicista, cientifista, etc.
SER TEÍSTA NO ES NADA FÁCIL HOY DÍA
ResponderEliminarPuedes reflejar tu vida en un Ser Vivo. Tendrías que superar la idea de que ese ser vivo trascendente no es tú proyección subjetiva. Mucha gente intenta creer en Dios, pero en el fondo sabe que está creando ella misma ese ente, esa persona. Mucha otra gente cree creer, pero en el fondo de su mente hay una duda sobre la existencia de ese ser. Vendría a ser algo así como un Papá Noel o los Reyes Magos con algo más de sofisticación y complejidad. O sea, un cuento chino que a lo mejor unas veces por sufrimiento o desesperación parece cobrar vida, pero quizás más por nuestro deseo de que cobre vida que por su realidad independiente a nosotros. Luego está el Dios que nos venden las religiones y las sectas. Nos suele parecer un Dios grotéscamente adaptado a las necesidades sociales, políticas, o las institucionales de la misma organización religiosa. Suele resultarnos un Dios parcial, sectario, a veces demasiado cruel y otras demasiado amoroso, pero siempre sospechosamente adaptable a los tiempos y lugares e intereses sociales. O también se nos presenta como una figura titánica compensatoria de vidas humanas radicalmente sufrientes, que habrá de nivelar las cosas para el fin de los tiempos con catástrofes correctivas. tales Dioses suelen tener revelaciones en libros que hoy día sabemos que fueron escritos por hombres de otras épocas en que era normal creer en Dios o dioses. Y, como es sabido, en esta época somos ya maduros y cada vez hay menos gente que crea en todos esos cuentos chinos. La ciencia nos demuestra que no hay Dios y la crítica histórica nos demuestra que la Biblia o el Corán son productos de la imaginación de gentes poseídas por ideas fuertes de signo alucinatorio o autosugestionables. Ideas que luego actuaban como centros gravitatorios de seducción y referencia espiritual o política.
Creer en Dios, un Dios vivo con Voluntad, es llegar a trascender todo esto mencionado arriba. Dar un salto de fe dramaticamente libre. ¿Cómo?
VAYA SALTO, ¡MADRE MÍA!
ResponderEliminarUn salto. Quizás al vacío. Tras los fenómenos de la vida, tanto internos a la mente como fuera, hay un vacío de sentido, una nada. He ahí la muerte. Nada se puede decir. Hemos traspasado la frontera, el límite entre la vida, los fenómenos existentes; y .... silencio eterno. Inimaginable. Nada. Pero ahora nos vamos acercando a una luz ténue en una lejanía cósmica. Nos vamos acercando y vamos viendo formas más o menos opacas, más o menos luminosas, más o menos energizadas, en movimiento. La existencia va cobrando forma. Lo existente va surgiendo de esa nada. Se va configurando en fenómenos. Nuestro cuerpo se va configurando en sentidos que perciben los fenómenos. Primero confusos. Caóticos. Indiferenciables. Ni dentro, ni fuera, sino todo mezcla y confusión. Hasta que pronunciamos la primera palabra. Y esa palabra ya define, separa, ordena, crea objetos. Esa palabra sigue creando. Un yo y un ello. Un yo y los otros. Un árbol, un animal, un océano, una luna... Un cuerpo. Mi cuerpo. Las cosas aparecen y desaparecen. La luz se enciende y se apaga languideciendo. Hay cosas y luego hay otras. Hay otros cuerpos y luego se van. Hablan, apuntan, gesticulan. El mundo se va creando, los hombres se van organizando...
No hay fundamento alguno en esta creación. Todo va surgiendo de una nada que ya nada tiene que ver con el mundo, el cosmos. Nadie ve la nada. Nadie identifica lo identificable. No hay palabra para lo no identificable ya que estamos en un mundo natural, de fenómenos, de cosas, de seres vivientes. Ni la razón, ni la historia natural y social, ni las religiones son capaces de trascender lo fenoménico. Nadie es capaz desde la propia "materialidad" de lo fenoménico de trascender a otra dimensión. Nadie a través de los esfuerzos de la mente, la ciencia, la filosofía o el arte es capaz de trascender su propia naturaleza y condición.
Solo si la misma trascendencia se hace ver o sentir de algún modo. Y ese modo habría de ser milagroso. Fuertemente intuitivo. Inexorable. La fe. La fe sería un arrebato de trascendencia que sobreviene y situa todos los significados del mundo entre paréntesis. Una llamada de la fe no es un ejercicio de razonamiento, ni una sensación mística transitoria, ni un dogma o ennumeración de doctrinas preparadas para creer. La fe es una locura que conecta con una Voluntad Libre y Omnipotente. Una Voluntad más allá de toda ley, porque es pura libertad y arbitrariedad. Una Voluntad más allá de toda razón porque no puede ser objeto de nadie, ni someterse a ningún logos.
BUENO, QUE NO QUEDE POR DECIR
ResponderEliminarEntonces la creación surge de un acto de absoluto libre albedrío, no por una necesidad racional de configuración de una materia eterna como pensaban los griegos y la metafísica derivada de ellos. Este universo sería una opción entre infinitas posibilidades de una Voluntad libre e inimaginativamente libre. Más allá de toda conceptualización ética de lo bueno y lo malo, de una moral del bien y el mal. Y esa Voluntad de Dios Vivo, vivo, con vida propia; es la que sostiene el mismo universo a su modo y capricho. Ninguna ley neoaristotélica o neoplatónica o escolástica regula su "ser". Tampoco la inmanencia espinocista puede dar cuenta de ella desde un plano de pliegues y repliegues infinito. Ni las leyes newtonianas, ni la física cuántica; ni los poemas más atrevidos de un Blake o Milton. Quizás la música nos acerque a lo sublime del Dios de la fe.
La fe no es fruto de ningún conocimiento, y ningún conocimiento puede llegar a ella. Es o no es. Surge o no surge. Y si surge se vive como una experiencia profunda. Y si no surge no hay razón posible o conocimiento que la localice y se la apropie. Gran misterio. La vida es un misterio. El mal es un misterio. La fe es consciente del gran misterio que subyace a todo el cosmos y a todo fenómeno. Más allá de las Ideas de Platón, de la materia eterna y el Uno Inamovible de Aristóteles o el emanentismo de Plotinio; más allá del noumeno de Kant o el espíritu Absoluto de Hegel. ¿Nos habla la Biblia de esto? ¿Qué hay en la Biblia sobre esto? ¿De qué revolución "espiritual" nos habla la Biblia? ¿Qué subyace tras muchos relatos bíblicos? Habría que volver a la Biblia desprovistos de teologías o doctrinas, o de las múltiples interpretaciones y varios intentos de restauración de las religiones.
ALGUNOS APUNTES SOBRE EL PROTESTANTISMO
ResponderEliminarFue Lutero quien "desreguló" al Dios de la fe del corsé escolástico. Los escolásticos como Tomás de Aquino intentaron instalar la razón aristotélica dentro de Dios para así hacerlo asimilable a la razón religiosa de una institución que así lograba controlar y administrar la fe a su modo y conveniencia. Lutero rechazó de plano el escolasticismo y reivindicó al Dios de libre Voluntad que obra por la fe y esa fe proviene de Su libre albedrío. La ruptura protestante fue una ruptura revolucionaria que sacudió los cimientos de Europa. La relación creador-creación comenzó a desplazarse de la institución eclesiástica y sus mediaciones sacramentales y sacerdotales, para dejar el camino a una fe directa entre Dios y el individuo. La fe va más allá de la ley, de toda ley: de toda obra meritoria humana que se la pueda apropiar y controlar. La fe es un don para quienes son llamados y la razón pasa a ser siempre instrumental. Instrumental en el mundo civil, de la política, del oficio, vocación, o profesión que profesemos. La razón queda separada de la fe, para ser subserviente o (más tarde y de modo inevitable) independiente a esta. La razón se va secularizando y la fe va quedando reducida a las iglesias, a la inevitable pluralidad de las iglesias. Todo ello no surge automáticamente: una vez sembrada la semilla del evangelio de la fe, las consecuencias se irían abriendo camino. Un camino doloroso. De guerras, de traumas, de agotamiento. Pero un camino así mismo a una individualidad nueva, abierta a la libertad del espíritu (aunque el cuerpo, para Lutero, quedaba sujeto a la razón de Estado). Pero la libertad de espíritu del "justo que camina bajo la fe" es un desplazamiento demasiado potente y peligroso para pararlo. El protestantismo mismo va poco a poco regulándose y organizándose y adoptando los frenos de la colaboración del hombre en su salvación, de la obediencia a sus instituciones y al estado.
ENCUENTRO CON BLOTERKI
ResponderEliminarHoy he visto a Bloterki, venía del bar de beber y estaba un poco chispa. Tenía la cara cocida. El cerebro desparramaba fórmulas matemáticas sin sentido. Le dije: "Bloterki, cuando bebes pierdes el control de todo. Te convenía ser más comedido con la bebida". Bloterki entonces se puso a llorar. Lloraba a mares. Me daba vergüenza porque la gente de la calle comenzaba a mirarnos. Entonces sacó un pañuelo enorme, casi como una sábana y se puso a secarse; pero al secarse se iba envolviendo en la sábana y parecía un fantasma. La gente se fue arremolinando y Bloterki al darse cuenta de la gente echó a correr por la calle Ulma envuelto en su sábana. Yo le seguí hasta que se sentó en un banco en medio de la oscuridad de un parque. Y entonces me dijo: "No me increpes más por mis moñas privadas. Yo bebo para poder ser humano en medio de tanta brutalidad y tanta locura. La bebida me hace ser un monstruo a MÍ MANERA. Mi locura, mis visiones, mi lenguaje..." Y entonces comenzó a dar puñetazos al aire y yo ya vi que era hora de elejarme del pobre Bloterki. Me fui alejando, pero todo me parecía extrañamente absurdo e innecesario. Los edificios. Formas materiales sin sentido. La gente siempre lejana y fría. Desconfiada salvo con quienes comparten locuras comunes y en grupos muy circunstanciales. Las luces, el asfalto, las aceras sobre las que voy caminando. Todo el sentido lo tenía que poner yo. Mi sentido. Combinación de sentidos, mezclas de recuerdos con sensaciones presentes. Noción de hacia dónde habría de dirijirme. Me di cuenta entonces de quién era. Vi todo en su justa medida y distancia. Perdí todo miedo y me sentí libre. Quizás por primera vez era libre.
WOW! NO HAY MANERA.
ResponderEliminarEn mi ciudad hay un@ polític@ que ha logrado concentrar el máximo poder político posible. Todo lo sabe y todo lo controla a través de sus microchips y microcélulas y poderosas redes informáticas. Ha logrado un control en red de absoluta jerarquía bajo el poder concentrado y centralizado en su yo. Un yo demencialmente desquiciado y paranoico. Pero eso lo vemos algunos, que hemos logrado hackear el cuasi omnipotente programa de Murkana, l@ polític@ y abrir un resquicio de libertad por donde respirar y hablar sin ser detectados. Pero no sabemos qué hacer con esta poca, minúscula libertad. Todo nos puede delatar: las luces de la ciudad están bajo su programa, las microcélulas circulan por todos los circuítos de energía y ven, todas ven y oyen....las personas obedecen ciegamente creyendo que son libres, pues la omnipotencia del poder de Murkana les alcanza de froma absolutamente inmanente y no hay manera de contrastar nada con algo exterior a tal cosmovisión. Vivimos en el peligro, pero la sensación de ser libres y ver otras realidades y posibilidades, nos hace fuertes, nos ayuda a organizarnos en células sólidas e impenetrables. Nuestro contrapoder es nuestra salvación....
O eso creíamos: Grekarma, nuestra líder, podría ser una pieza más del programa de Murkana, y entonces toda nuestra ilusión podría ser parte de la omnipotente y demencial imaginación egocéntrica de Murkana. La máxima concentración de poder político jamás logrado. Aggghhh!!!
Vital de Andrés nació en....vivió en....trabajó en.....tuvo....era...sabía que...desconocía...viajó a....fue amigo de....fue también....en....y con.....actualmente.....y....y.......perdido entre palabras...busco verdades a medias....soy....exactamente....pero .... quizás....un beso...un apretón de manos...sí, aquella montaña....desde allí veo...te veo... qué rico estaba...ya sabes....no sé....
ResponderEliminarCUIDADO CON EL AMOR
ResponderEliminarEl amor es una increible energía que permanece inconsciente o indefinida durante un tiempo, hasta que se encarna. Y se encarna en personas que responden a unas vibraciones y resonancias especiales. De repente dos cuerpos son atrapados por fuerzas inconscientes que les despiertan a una misma sensación de poder de atracción que subvierte la percepción de normalidad en la que ambos cuerpos vivían. Es algo más complicado y ha de describirse buscando los lenguajes adecuados. Es fácil caer en reducionismos psicologistas o cientifistas de cualquier tipo y entonces se oyen aberraciones del tipo de reacciones químicas que acontecen entre dos cuerpos por arte de birbiloque. O sea, una cuestión de HsO + CO2, etc... Todo bajo control Mr. Spock.
El feminismo hiperradical no quiere saber nada del estado de enamoramiento por razones de discurso político liberador, sin darse cuenta que la gran energía inconsciente e indefinida va más allá de toda política, de toda ciencia, de toda ideología. Es un poder real y materialmente posible, pero el significado y el por qué se escapa a toda explicación de conveniencia política y científica. Cuando Felipo y Romanola se enamoran la atración proviene de una x que somos incapaces de despejar, pero que al ser un estado de encantamiento, algo mágico; debe ser tratado como una experiencia mística o religiosa y aprovechar tal estado para descubir dimensiones de uno mismo que le han de hacer crecer, expandir hacia una mayor libertad,. Pues hay peligro de caer en una espiral de locura y posesión que puede acabar en un apego vampírico y verse atrapados en las telas de araña de pasiones destructivas. La fuerza del amor no puede ser tratada con ligereza o como si fuese un capricho ocasional a disposición de la voluntad que puede escoger aceptar o rechazar tal estado de alta intensidad emotiva. Craso error. Y peor el trato de frivolidad sentimental o comercial o de disección política llevada a cabo con rabia y resentimiento por parte de sectas feministas o inhumanistas.... todo nos acaba llevando a una mayor confusión...
El amor que lleva al estado de enamoramiento requiere de sabiduría y visión para reencauzarla a una vida de expansión y mayor creatividad. Si es amor entonces no puede ser posesión. El amor es el amor a libertad del otro. Una libertad que ha de ir por encima de cualquier pulsión de posesesión o posesividad, para no convertirse en una fuerza desestabilizadora o en una neurosis. Son encuentros de resonancias con las que jamás hemos de frivolizar, politizar o ideologizar.
LENGUAJES
ResponderEliminarEl mundo literario. Entras en el mundo de la literatura y navegas en él de forma inmanente. Todo lo que ves lo trastocas en literatura. Lo transmutas en literatura. Otros lenguajes te son externos: lenguaje científico, político, técnico, matemático, histórico, del derecho, otras artes, religión, etc. No mezclas lenguajes. Son mundos aparte. Dimensiones aparte. El mundo de la literatura es un mundo para aquellos navegantes que se han entregado a él.
Consideramos el mundo real a lo que ocurre directamente en nosotros. Las narrativas que describen en clave realidad/objetividad. Hoy día casi todo pretende describir la realidad y casi todo pretende ser objetivo. Pero, ¿Es así? ¿Podemos hablar de un mundo real y objetivo en oposición a otros mundos que no lo son? ¿Puedes crear un mundo donde encuentres misterios y fantasías que viven y albergan en tus rincones más insólitos de tu personalidad o quizás los puedes reconocer en otros artistas o escritores? ¿Y la poesía? ¿Y la música? Las canciones que reavivan recuerdos, recrean mundos imaginarios, tonifican el espíritu con su cadencia y ritmo. ¿Y el lenguaje religioso? ¿Falso? ¿Otro lenguaje? El lenguaje de la fe a través de la revelación e historia sagrada. ¿Cada cosa tiene su lenguaje? ¿Cada dimensión tiene su lenguaje? ¿podríamos establecer lenguajes comunes a nivel de vida civil, social? ¿Ley y razón probada?
LAS FRONTERAS
ResponderEliminarCuando te acercas a la frontera quizás te hundas en fango y lodo. Es posible que no puedes caminar. Alguien te tendría que sacar, pero no sabes si antes te podrían disparar. Las fronteras son siempre confusas. No distingues bien al amigo del enemigo. Podrían sacarte y llevarte luego a la mejor prisión del territorio, o te podrían instalar en una zona residencial para inmigrantes a cambio de integrarte en tu nuevo mundo.
Las fronteras son inevitables, salvo que prefieras seguir siempre en el mismo territorio. Y son siempre arriesgadas: has de llevar lo mínimo contigo y hacer frente a lo desconocido y lo inesperado. Una frontera llena de fango y pozos de barro es una frontera hacia un territorio peligroso. Puede desintegrarse primero el cuerpo sin esperanza alguna de salvación. Puedes ver tu conciencia ahogarse sin más futuro que la muerte. Pero te puedes salvar gracias a la ayuda de quienes viven al otro lado: el amor de alguna gente no tiene límites. Abrazarías a tus salvadores sin límite y agradecimiento infinito. Una nueva vida es un nuevo comienzo y eso tiene sus estímulos. Nuevos territorios a explorar, la construcción de una nueva forma de ser; la adaptación a quienes ves como extraños y raros, o quizás diferentes pero amables y abiertos. Atravesar fronteras es siempre peligroso y arriesgado, pero muchas veces es necesario arriesgarse a cruzar fronteras hacia nuevos territorios y oportunidades de ser de otra manera. Otra visión de las cosas. Desplazamientos mentales, espirituales.
TERRITORIOS FRONTERIZOS
ResponderEliminarHay fronteras cerca de tí. Cuando hablas con tu compañero de trabajo estás en una frontera incierta por mucha seguridad que parezca existir. Territorios conocidos y territorios desconocidos, más allá de lo aparentemente conocido y seguro se abre la frontera. La frontera no es una raya fina que separa territorios de forma clara y definida. No. La frontera es siempre un umbral, una penumbra de ambigüedad, de colores que se mezclan, de sensaciones confusas; de ideas que pierden fierza o costumbre y se van desplazando hacia otros significados menos precisos y más oscuros o clarioscuros. Hay fronteras en los ámbitos más familiares y es preferible mantenerlas siempre seguras y en orden. Pero nos tienta intentar abrir fronteras y atravesarlas. Todos los días hablamos con personas, vivimos con personas a quienes conocemos sin lugar a dudas de forma más o menos íntima; pero en algún momento puede abrirse una frontera y he ahí un nuevo territorio esperando ser explorado, nombrado. Peligros. Amor u odio. Acogida o rechazo. Hay fronteras en todo nuestros territorios familiares y comunes que nos podrían desplazar y llevar a lo increible, lo indefinido, lo inescrutable. No olvides que todas las fronteras tienen su guardias o sus pasos fronterizos vigilados. Para algunas necesitas tu coyote.
UN APUNTE SOBRE NACIONALISMO COMO CATEGORÍA DE SENTIMIENTO Y PASIÓN
ResponderEliminarEl nacionalismo (español, catalán, japonés, peruano, etc.), como ideología sigue siendo una categoría fundamental para muchos; tan fundamental y tan condicionante de sus emociones y pasiones, que supera con mucho el concepto de clase, género, identidad política, e individual. Supera incluso a la religión como categoría profunda. De ahí su potencial, tanto constructivo como destructivo. Uno no es nacionalista, hasta que le toquen la fibra...entonces....grrr!! Lo peor es cuando el nacionalismo se coloca más allá de la democracia y se declara el dios omnipotente de la política.
EL DESIERTO NOS ESPERA DE NUEVO
ResponderEliminarFuimos a ver al Anciano Muller. Autoridad espiritual de las aldeas de nuestro pueblo. Y nos dio la respuesta:
"La clave está en los a priori. Los a priori buscan un orden; una lógica, una razón que seguir. Trasciendes los a priori y te lanzas a un territorio fuera de toda configuración o paradigma. Estás en territorio salvaje. Todo puede ocurrir. Todo es posible o imposible. Nada ni nadie te define o te ordena obedecer. Eres tú quien ordena, quien crea: estás fuera de toda jurisdición. Te has convertido en un mutante, en un hereje maldito, en un nómada que se las ha de arreglar solo o con su comunidad, su tribu, su pueblo. ¿Creías que ya todo estaba sometido al saber de la ciencia o al orden de la razón, de cualquier razón? ¿Te sorprendes? ¿De qué te sorprendes? Es todo nuevo y todo está a tú disposición para nombrarlo de nuevo. Todo es posible e imposible al mismo tiempo. El desierto nos espera y la voz de Yah, del Dios vivo seguirá hablando".
ANCIANO MULLER
ResponderEliminarEl Anciano Muller tiene una cabeza picuda. Sus ojos son reptilianos. Negros y vivos. Brillantes. Cuando habla mira hacia los bosques circundantes. Y habla con voz reposada y con sabiduría. Nosotros nos sentamos en el banco grande que hay a la entrada de su casa. Los a priori a que se refiere Muller deben de ser algo así como unos filtros o lentes con filtros implantados en algún lugar fundamental del cerebro y que nos fuerza a ver las cosas bajo un ángulo o configuración concreta. Eso lo pensaba yo mientras le escuchaba y echaba un sorbo de cerveza. Para entenderlo mejor habría que pensar que el mundo ahí fuera de nosotros o el mundo interno a nosotros, pues es indefinido, neutro a cualquier significado salvo el puramente intuitivo o de reflejos. Entonces a través del lenguaje, de hábitos culturales, de distribución de tiempo y espacio, pues nos vamos implantando un a priori o unos a priori a través de los cuales configuramos la realidad en función de una cultura, de unos significados; y vamos comprendiendo tanto el mundo de afuera como el interior de nuestra mente con un sentido, con dirección. Todo ello implica una razón, un logos, un orden social, un orden político, un lugar en la vida. Sería lo que llamaríamos la realidad. El problema es que los a priori así definidos por el viejo Muller, no son toda la vida, ni el mundo en toda su infinitud, ni abarcan toda la experiencia de una persona. ¿Pero hay manera de salir, de quitarse los implantes del cerebro y saltar ahí afuera en la pura intuición y reflejos? ¿Qué pasaría? ¿Locura? ¿Caos? Ese sería el territorio salvaje del que habla el Anciano Muller.
Si logras borrar el a priori, nos dice Muller que "todo puede ocurrir". Es cierto que si eres capaz de mantenerte en tal estado primigenio comienzas a crear el mundo de nuevo, pero más bien que crear yo diría recrear. Volver a un estado crudamente animal no es posible una vez que tienes integrado todo el lenguje en tú mente. Yo creo entonces que lo que Muller quiere decir es que, más que borrar tu cerebro y ponerlo en tábula rasa para comenzar de nuevo; lo que puedes hacer es desplazar o desarmar tus implantes a priori y colocar otros que trasciendan los a priori establecidos por inercia cultural o educación o experiencia; y sentirte libre de verlo todo, no exactamente nuevo, pero sí recreado a tú voluntad, libre voluntad...¿libertad de artista? ¿De creador? A partir de ahí, y si eres capaz, tienes la posibilidad de recrear tu vida como individuo libre....sujeto a nada, bajo tu protagonismo, porque así lo deseas. Porque puedes decir no o sí. Hum! Esto habrá que debatirlo con el resto de los amigos.
BUENO, POR ALGÚN LUGAR HAY QUE EMPEZAR
ResponderEliminarLas plantas del bosque. Me siento en el suelo del bosque para observar una planta. Miro su silueta, su contorno, su cercanía y profundidad. Su color y tonalidades. Juegos de luces. Luces y sombras. Hay algún insecto que se aproxima a ella, o la sobrevuela, o vive en ella. Sigo así por un tiempo. Me levanto y sé que no voy a ver a la persona que quisiera ver. Simplemente, no aparecerá por este camino del bosque. Es un camino de soledad y fantasmas. Podrían aparecer fantasmas. No hay ninguna ley que no haga posible la aparición de fantasmas. Ni tampoco lo contrario: que lo haga imposible. Hay posibilidad de que cualquier cosa pueda suceder. Libre de la ley de la contradicción. Libre del 2+2=4. Podría aparecerme un fantasma, o una fantasía encarnada. O surgir de repente un carro de Elías y ser arrebatado al séptimo cielo. O sin darme cuenta llegar al templo reconstruído por Esdras y Nehemías. ¿Cómo ha sido posible? Todo puede ser posible y nada podría ser posible en una absoluta libre voluntad. Es una maravilla poder seguir caminando por este sendero del bosque.
REALISMO MÁGICO
ResponderEliminarLa magia es la posibilidad de trastocar las leyes de la naturaleza y hacerlas funcionar de otra manera, o hacer leyes nuevas que trastoquen toda la realidad conocida en una nueva realidad completamente chocante y contradictoria en comparación con la realidad presente. El milagro sería algo parecido. Que eso no haya sucedido en nuestras vidas no quiere decir que no pueda suceder alguna vez. De acuerdo que el mundo físico se nos manifiesta con leyes regulares y repetitivas, predecibles; y con tales leyes se cierra toda posibilidad de magia o milagro alguno. Pero el mundo surge del misterio, el mundo aparece o viene de algún sitio o no-sitio. Quizás de la no-existencia, o la "nada", o vaya usted a saber. Y no sabemos cuántos mundos y universos podrían aparecer o desaparecer o mezclarse ... De vértigo. Y no lo sabemos porque esa no-existencia es inapelable y queda fuera de nuestra comprensión. Obvio. Pero queda abierta la pregunta sobre qué o quién nos podría tener sorpresas inesperadas y en el tiempo o momento oportuno. ¿Por qué no? ¿Quién está seguro de ello? La razón y la ciencia son siempre instrumentales, no pueden responder a preguntas que van más allá de su razón de ser.
LEY Y RAZÓN
ResponderEliminarLey y razón se dan de la mano. La ley y la razón puras son ideales. Nunca existen en la realidad. En la realidad son siempre ley y razón en función de... Observo a las personas concretas. Cómo entienden la ley y cómo usan la razón. Mi observación me lleva a ver cómo la ley y la razón se interpretan siempre en función de mis ventajas personales. Si la ley y la razón no responden a mi forma de ser ni a mis intereses, entonces mi obediencia será estrictamente por obligación y por miedo a que me metan en la cárcel. Se puede comprobar en Manolus o en Zapatina o en Sabandro de Cicatusta. Todos entienden la razón y la ley de esa forma egoísta o centrada en sus intereses particulares. Si la ley coíncide, bien, si no coíncide entonces se actuará de forma que se logre hacerla coíncidir con mis intereses. Y si no es posible tal cosa pues me declaro en potencial rebelión contra la ley. Ojo, cualquier interés. Interés del pobre, del rico, del menos pobre y del menos rico. Interés del artista, del profesional, del obrero, del hombre, de la mujer, del gay o de la lesbiana. Todos buscan que la ley y la razón les sea lo más favorable posible. Pero, la ley y la razón nunca pueden satisfacer a todo el mundo por igual. Lo que es razón y ley para unos no lo es para otros. Lo que compensa a algunos descompensa a otros de formas directas o indirectas. O viceversa.
Si la ley o la razón me oprimen y me son desfavorables, buscaré mi compensación visualizando un mundo donde la ley me es favorable; y si me es más fovorable a mí, pienso que será más favorable a todo el mundo; pues el mundo se mide siempre a través de un ego, de una conciencia personal/individual en primer lugar. Luego, otras conciencias se unirán o coincidirán con tal sentir o no. Y si logramos ser fuertes en base a número y poder político, pues impondremos nuestra razón y nuestra ley como las más razonables y las más justas. Esta es la realidad política.
¿Es posible apelar a una razón externa y objetiva para imponer una ley y una razón funcional/instrumental? No hay objetividad a menos que otras conciencias la compartan contigo. De no existir tales conciencias comunes, entonces no habrá nunca tal objetividad externa.
Quienes piensan que la razón y la ley han de coincidir con una realidad objetiva fuera de toda intrusión subjetiva o de interés particular, entonces utilizarán toda la fuerza disponible para hacer coíncidir su Razón Universal y su Ley Universal con el mundo social y la Historia. Son las tendencias totalitarias.
LUZ Y COLOR
ResponderEliminarSin una conciencia colectiva que dé sentido, no puede haber realidad compartida. Ningún sistema político sería capaz de mantenerse en el poder en base a la pura fuerza y el miedo. Tiene que haber ideologías o paradigmas o constructos imaginarios que sean compartidos por un número importante de individuos para que un estado funcione. Lo siento por Kant: no es posible una ética independiente o autónoma que sirva de forma universal e incondicionada. Es como la Ley o la Razón consideradas como cosa en sí: simplemente son ideales y la ética kantiana es otro ideal. Mi ética y mi moral van ligadas a mi ideología o paradigma. Mi ética ideal en la práctica se convierte en ética concreta y visible y favorable a unos o a otros. Inevitable. Es el mundo y su juego. Si tu ética es cristiana, pues no es la ética musulmana, por mucho que se idealice o se pretenda, salvo que unos y otros dejemos de ser cristianos o musulmanes para ser otra cosa, etc. Y esto viene a cuento porque todo poder político o ideología, etc,. se justifica en base a una ética o moral más correcta y objetiva, siempre en función de un bien universal. Nadie quiere reconocer sus intereses particulares como tales, salvo que los elevemos a valores universales, racionales. Reconocer que uno sólo está dispuesto a reconocer en primer lugar su ego, sus intereses, su prejuicios, su subjetividad; es muy feo, muy egoísta, muy antipático; por no decir antisocial, "individualista" como algo sucio o vil. Si no te disfrazas de abuelita amorosamente universal y racional, tu condición de lobo asustará a todo biempensante. Y para juzgar a los demás todos somos biempensantes. Jugamos a las máscaras continuamente, aun si dejamos ver las pezuñas peludas bajo la bata hogareña.
Pero no es lo mismo un dictador sin escrúpulos que una democracia occidental; no es lo mismo una conducta que otra: una conducta puede ser maligna o bondadosa en función del sufrimiento o bienestar que causa. Pero eso no es siempre tan fácil de medir, pues a veces el aparentemente maligno o persona sin escrúpulos saca a todo un pueblo del infierno y por lo contrario, un líder o lideresa aparentemente bondadosa puede llevar a todo un pueblo a la ruina y la miseria. El juego de poder es engañoso. Abundan los cantos de sirena, las máscaras, la seducciones, los malabarismos, los espejismos. Nada parece someterse a una razón clara o a una ley justa en toda su idealidad. Nada parece someterse a una ética o moral justa, razonable, o ideal. Ese es el juego del mundo. Darse cuenta de ello y su inevitabilidad es empezar a vivir en este mundo. Salirse de este juego es posible, pero ello requiere una sinceridad desesperante con uno mismo: una apertura al misterio que subyace bajo nuestra realidad de luz y color y ser capaces de empezar a ver luz y color donde nadie ya quiere mirar.
SE VEÍA VENIR
ResponderEliminarEl justo por la fe vivirá. Si la fe y no las obras, entonces hay un camino de la fe que no se corresponde con las obras de la razón, de la ética, de la moral, de la ley. La fe sería un misterio que podría trastocar nuestra forma de vivir. Un contacto directo con una voluntad viva que subyace a toda la creación: un Creador que sustenta el universo al mismo tiempo que lo trasciende absolutamente. No el dios racional predecible y regulado por una razón o ley universal. Ese sería el dios de las religiones institucionalizadas y con fines de cambiar el mundo hacia esa Ley. O sea, lo imposible, lo ideal, la búsqueda de una objetividad ética a la que someterse. Nada nuevo. Es la versión religiosa de la misma pretensión política humanista o atea.
Mi protestantismo siempre me hizo pensar en tal posibilidad. Una sensación de que todo tiene un sentido incomprensible, inapelable a la razón; pero una fuerza viva y trascendente que actúa como voluntad libre y capaz de abrir un camino de fe irresistible; quizás absurdo a la razón y la ley, pero capaz de trascender la ansiedad de una existencia vacía, nihilista, desencajada entre lo real y lo ideal jamás alcanzable. Quizás esa sería la locura de la fe.
FE Y ABSURDO
ResponderEliminarLa fe tiene un lenguaje diferente a la razón. Las cosas de razón se entienden con la razón. Las cosas de la fe son cosas que tienen que ver con el sentido de la vida. Son esas preguntas últimas que siempre nos hacemos alguna vez, hasta los más ateos y materialistas. La razón y la ciencia producen conocimiento en base a la experiencia, los hechos probados, los fenómenos iterables. En base a esos avances en la investigación y los nuevos descubrimientos puede hacerse una filosofía especulativa, pero nunca podrá ir más allá de lo que la ciencia ha situado como frontera provisional. El lenguaje de la razón e investigación enfoca la historia y los hechos sociales con la misma metodología de hechos demostrados o demostrables. No puede hacerlo de otra manera sin caer en la pseudociencia o en la charlatanería.
El lenguaje de la fe es otro. Es un lenguaje profundamente existencial y por ello inevitablemente irracional. Las cosas de las que habla no tienen porqué ser probadas, ni vividas de la misma manera por los individuos concretos que se hacen preguntas sobre el sentido de la vida. Son preguntas que surgen del desasosiego, de la inquietud y ansiedad que acarrea el simple hecho de vivir. Cada individuo ha de hacerse sus propias preguntas y alcanzar, si puede, sus propias respuestas. Unos recurren a la metafísica, otros a la religión, otros al puro y duro escepticismo, otros a un existencialismo derivado de muchas causas, entre ellas la contemplación de uno mismo en la vastedad de un universo tan abrumadoramente sorprendente. Otros recurren al lenguaje de la fe, lo cual implica el reconocimiento de un Dios vivo y la posibilidad de relacionarse con él. La fe implica también una revelación en forma de libro. La fe entiende la revelación como un lenguaje que otros en el pasado han dejado por escrito y que nos muestra cómo Dios habla y se relaciona con los seres humanos. Si la ciencia o la razón entra en la fe, la fe quedaría anulada como simple absurdo y fantasía. La experiencia de la fe no puede ser probada objetivamente como se puede demostrar un hecho o acontecimiento físico. El lenguaje de la fe habla de la posibilidad de situarse más allá de toda racionalidad, sin negar para nada el uso y valor de dicha racionalidad; de todo conocimiento, sin negar el uso y valor de tales conocimientos. No se trata de creer en cualquier doctrina o dogma elaborado, sino de creer que Dios rige el universo como voluntad libre y arbitraria y que eso entraña un misterio irresoluble por la mente humana, pero que da un sentido radical y vuelco a la vida de la persona que recibe el don de la fe. ¿Absurdo? Quizás. La fe es efectivamente un absurdo para la razón. Reconocido.