Además tenía la idea de que la vida era un milagro. Toda situación era para él un milagro.
El hecho de que algo existiera y estuviera ahí presente le resultaba extraordinario. Hasta lo horrible, lo feo, lo cruel, lo fanático, lo ignorante, la perfidia y la prepotencia, le resultaban extraordinarios. El hecho de existir, según él, se sustentaba en un sustrato de misterio que podría ser divino o diabólico, o mezcla de las dos cosas.
O, también podría ser simplemente lo que abarcan los sentidos, y; todo aquello que no resultare visible o audible o sentido por el tacto o las palabras, nos habría de ser indiferente. Ese no-ser, entonces nada tendría que ver con nosotros. No habría posibilidad de trato o relación, y entonces para qué preocuparse. Pero, quién sabe,--especulaba él sin miedo--podría haber otras cosas, podría haber sustratos no visibles, espirituales; entes inteligentes más allá de nuestra percepción y con naturalezas misteriosas. Esa era parte de su exploración a través de la introspección y las muchas lecturas y las técnicas hermenéuticas cada vez más perfeccionadas.
Aquel señor serio y afable yo lo había conocido cuando tenía dieciséis años y fue siempre una referencia de persona inusualmente culta y de profunda agudeza intelectual. Su casa era espaciosa. Vivía en las afueras de la ciudad cerca de un bosque. Era una casa señorial
En aquella primera visita a la casa el señor me invitó a ver la biblioteca. Libros. Pensamientos. Historia, Historias. Narrativas, viajes, aventuras. Ciencia. Y sobre todo filosofía y religión. Aquella visita me marcó para siempre. Una fuerte sed de saber se apoderó de mí y nunca me abandonó.
Así que con los años llegué a tener también una casa grande con un salón espacioso y un piano, una mujer afable y efectuosa y sobre todo una biblioteca, una gran biblioteca con un par de butacas y un ventanal que mira al bosque.
Pero mi angustia fue no descubrir el punto cero. El punto-eje del universo. Jamás mi mente había sido capaz de descansar ni un segundo en la indiferencia absoluta. En el ansiado éxtasis de la absoluta neutralidad cósmica.
Se acerca la Navidad. Turrón y mazapán. Y vino con gaseosa. Mantel y conversación. ¿Quién está en frente? No sé. No distingo. Estoy poseído por la embriaguez de un sueño. No son las personas ni los rostros, sino la gana de hablar en sí y porque sí. Música de villancicos. Cantan almas lejanas con panderetas y zambombas. Si abro la puerta y salgo a la calle ha de estar frío. Frío penetrante y luna llena. El cielo nos resulta impenetrable y por eso las miradas siempre se pierden en lo indecible. Bebe y olvida. Mi gaseosa impide la embriaguez del cuerpo, yo quiero sólo la del alma. Y lo consigo. Hay fechas del año que son sagradas y son sagradas porque aparecen los magos y con sus conjuros nos abren los ojos. Siempre me ha poseído la embriaguez de ese sueño navideño. Es dejarse vivir por él. Quién sabe adónde te ha de llevar. Da igual. No me voy a negar a vivir lo que me ha sido dado. Dádiva. Don. Gracia. Prístina extrañeza abrazando a todo el mundo que ha cenado en el salón. ¿Tocas la armónica? Sí.
ResponderEliminarAVE MARÍA PURÍSIMA
ResponderEliminarImperturbable. Bable a les escueles. Escolástica fue la filosofía por un tiempo. Escolar en pantalón corto por las calles de Sama lloviendo y con frío. Años 50. Librería la Escolar en la Calle Dorado. Perturbando la escolástica con ideas peligrosas de panteismo o dualismo. Oiga, no se meta a despertar a la Babilonia la Grande con recuerdos fantasmales. Horror de fantasmas en vela durante siglos. Un escolar entra en la escuela y el director le da una hostia por hablar bable. Usted babea. Usted bablea. Yo soy Don Enrique, Kike, para mi señora. Chocolates Kike. El negocio del chocolate. Late el corazón con fuerza ante el terror de Babilonia la Grande, madre de todas las rameras. Rama. Súbete a las ramas para que no te lleve el oleaje. El oleaje fantástico de un sueño trastornado por la fiebre. Por la mañana los cristales estaben xelaos y el cuerpo débil. Débil era ella. Era débil y entonces su marido la insultaba cuando llegaba borracho, y él era débil en su trabajo y los compañeros se reían de él. Y los compañeros eran débiles ante el poder del jefe. Todos aspiraban a matar algo. A destruir algo. Un algo invisible.
Imperturbable ante la vida. John Wayne. Clean Eastwood. Los desiertos imperturbables. Los caballos salvajes. La fuerza del viento. La mujer solitaria que mira con ojos tristes y melancólicos. Perdida en las inmensidades del desierto. Un espejismo de cristal. Una columna de marmol blanco entre las palmeras. Llueve. Hace frío. Un escolar va a la escuela y Don Enrique, Kike, le da otra hostia por no decir Ave María Purísima.
EL VERBO
ResponderEliminarNavidad. Deidad. Dios. Luz misteriosa del universo. Estrella errante por los cielos. Reino de los Cielos. Dios anda errante por los cielos. Fríos espacios cósmicos, inmensos. Mi luz se apaga, dejaz que me acercque al niño. Dejad que me acerque al fuego. Dejadme nacer como humano. Luz de fuego de leña. Calor animal. Calor humano. Fuertes olores de cuerpos vivos. Hielos permanentes en multitud de planetas. Infiernos venusianos fundiendo rocas. Frío y calor. No encuentro el equilibrio. Mi creación me devora. Se expande y se contrae.
Oiga, deme una coca cola light. Light my heart. I've got lost and I forgot where I was. Si vous plait, donnez-moi un peu d'argent pour le métro. Hey, you! Could you spare a dime? Tengo sed. Tengo hambre. I'm starving and I can't find my place on this universe. Je suis desolé, mais je ne sais pas qui est vous. Tien! un euro pour acheter une cravate. Non alcuentro el ser na llingua, habrá que buscar más lloñe, sicasí I know I'm not far from home.
Hoy es el día de la Resurrección. Navidad. Light my soul with your sprite. The town was dark and cold. Far away in the mountains I heard the howls of the wolves. Toda lengua humana es mi ser. Tout les hommes sont mon frères. En el principio era el verbo y el verbo se hizo carne.
UNIVERSO ESPECTRAL
ResponderEliminarProyectando. Inyectando. En tanto. Las imágenes sobre la pantalla. Me he quedado con las imágenes y he abandonado la pantalla. No puedo vivir sin pantallas ni sin imágenes. Si es así, entonces ¿quién soy? ¿Qué soy? Screen. Quizás sea otra imagen proyectada. ¿Pero, quién o qué nos está proyectando y cuál es la pantalla? Y nosotros las imágenes. Figuras de luz sobre luz, colores sobre colores, movimientos. Y si siempre en movimiento nunca hay posibilidad de quietud.
¿Quién juega con nosotros? ¿Quién ha inyectado el sufrimiento? Imágenes sobre imágenes proyectadas en infinitas pantallas y espejos superpuestos. Juegos de luz y color. Tonalidades y espectros de luz. Tonalidades y espectros de mínimo placer y máximo sufrimiento, o alejamiento. ¿Pero hay original?.
Alguien o algo está poseído de una fuerte carga de odio infinito. ¿De dónde surge esa luz tenebrosa? Luz fría. Vacía. Hay un algo que no para de representar su odio y vacuidad en infinitas escenas y perspectivas y planos sobre las pantallas de todo tipo. Imágenes que contemplan sus imágenes sobre pantallas sin fin. Espejos en perpetuo reflejo ¿De dónde proviene la luz como idea antes de ser luz visible? Luz en abstracto. Platón. Copia sobre copia. ¿Dónde está el original?
Proyección. Cuerpos espectrales. Espectros en movimiento inyectados de sufrimiento dispuestos a proyectarse sobre pantallas como imágenes de vana ilusión. Universo espectral.
ESPEJOS Y ESPEJISMOS
ResponderEliminarLa imagen en un espejo es irreal, pero necesita de la realidad que refleja. Sin esa realidad viva o material, no hay imagen. El espejo es fiel a cualquier realidad que se le coloque en frente. Aunque sea pura oscuridad o pura luminosidad. Representa dicha realidad. Representa escenarios. Cuerpos. Rostros. Pero no los graba. No los retiene. Así como refleja un escenario, puede reflejar otro seguidamente. Sin recogerlo. Sin retenerlo. Imágenes y representaciones desinteresadas, que no dejan huella. Simultáneidad de realidad y reflejo. Se (re)-presenta la realidad presente. Nadie puede comer la manzana reflejada. Nadie puede besar o abrazar la persona deseada. La imagen reflejada en un espejo nos señala, nos indica, nos ayuda, nos dice; nos da conocimiento de los objetos reflejados, pero no nos permite tocar, oler, sentir, oír, movernos dentro. La imagen especular nos produce espejismos e ilusiones que afectan a todos los sentidos menos la vista. Sin vista no hay reflejo especular. Espejismos e ilusiones. Ver y tocar solo cristal o superficie. Pura impotencia del cuerpo. Pero la imagen crea efectos. Los espejismos y las ilusiones son sus efectos. Que pueden engañar y tomarse como realidad cuando no son más que efectos ilusorios. Vivir de ilusiones y espejismos es vivir una realidad aislada que pierde comunidad con la realidad común de los mortales. La realidad común del sentido común. ¿Cómo se constituye el sentido común? La realidad común....
Interesante, porque ahora podríamos pasar a la fotografía o al cine las motion-pictures, vídeos, televisión......
ESCRITURA, FOTOS.
ResponderEliminarFotos. Mis ojos son una cámara que toma vistas continuamente y las graba en mi cerebro, donde luego se reviven como recuerdos, pero no todas las vistas quedan grabadas; tan solo algunas se reviven como recuerdos. Pero la relación entre la vista y el recuerdo ya está interferida por el presente que insta a revivir ese recuerdo. No hay adecuación o coincidencia entre recuerdo y la realidad que recoge la vista. Apelamos al recuerdo y sus imágenes en determinados momentos presentes.
Apelamos a la escritura para fijar de algún modo el flujo de experiencias, y organizamos la escritura en forma de discurso para disponer de conocimientos cuando lo requiera el presente. O sea, reavivamos a través del discurso escrito, aquellos conocimientos o experiencias que nos van a ser necesarios en el presente. El discurso escrito o la escritura en general nos permite revivir, repetir en el tiempo las experiencias y conocimientos escriturables.
La foto hace lo mismo. La cámara nos ayuda a recoger con mayor precisión las imágenes que el cerebro no es capaz de garantizar en todo momento. Ni tampoco una descripción discursiva escrita. La foto recoge la realidad de un momento concreto y lo fija en una imagen bidimensional que queda como congelada en el instante. Podemos recurrir a ella en cualquier momento para revivir aquel instante concreto, y lo haremos por razones de necesidad en el presente: para recordar, para volver a analizar y precisar, como prueba, etc. La foto, al igual que la imagen especular, solo apela a la vista. También la foto crea afectos, revive emociones, suscita deseos, puede incitar la imaginación o la inteligencia o el placer estético en el momento que se vuelve a hacer uso de ella.
Vemos cómo hacemos nuestra la "realidad" ahí afuera a través de re-presentaciones de imágenes, conceptos, y a través del uso afinado o elaborado o enriquecido del lenguaje a través de la escritura. Lo que el sentido de la vista (en este caso) no puede captar o garantizar para un uso o reavivamiento futuro, lo hace la escritura, la representación pictórica o el dibujo y la foto con su realismo y mayor riqueza de matices.
IS ANYBODY OUT THERE? (CONTINUACIÓN DE ANTERIORES REFLEXIONES)
ResponderEliminar¿Qué realidad hay ahí fuera de toda re-presentación? Si adoptamos el método empírico y matemático de las ciencias naturales, entonces descubriremos leyes físicas que regulan un universo representable bajo un discurso o lenguaje también preciso y objetivo, e intercambiable para todo el mundo. El éxito de tal método es evidente hoy día. Tan evidente que es el que domina toda nuestra vida diaria. Por lo menos ese es el referente del poder político, de la razón de Estado, de la normalidad y del sentido común. Nunca tendrás problemas si logras traducir toda experiencia en discurso racional-científico: no solo la naturaleza, sino también la sociedad, la enseñanza, las ciencias humanas... Hechos, datos, estadísticas.
Personalmente creo que a la ciencia se le imponen topes a la hora de investigar todo aquello que sería investigable de forma auténticamente libre. Las ideologías políticas de moda saben cómo financiar aquello que interesa que la ciencia investigue, y sustraer recursos a aquellas otras posibilidades de investigación que no gustan o no van en la línea politicamente correcta. Dejémonos de cultivar ese ingénuo cientifismo que ve la Ciencia como algo más allá del bien y el mal social o fuera de toda interferencia política. Simplemente eso no es posible, aunque siempre será deseable.
Pero ¿es esa la única realidad ahí afuera? (Pink Floyd: Is anybody out there?). Las representaciones artísticas en todas sus modalidades nos informan de un universo representable imaginativamente que nos interpela a niveles profundos de emociones, pasiones, paradojas, anhelos, ilusiones, contradiciones, fricciones, sueños, hechizos sentimentales, odios, perspectivas mágicas, sobrenaturales, juegos de desplazamiento de significados mito-poéticos, existenciales, religiosos, etc, etc.
Bien parece que el juego de la representación es riquísimo y que la realidad ahí afuera puede ser la misma de ahí adentro de nosotros. Sin el poder trascendente del arte o de la filosofía en sus lenguajes particulares, en sus mediaciones o producciones no seríamos capaces de conocernos, de visualizar nuestros dramas y anhelos, nuestros sueños, nuestros misterios y hechizos, nuestros espacios y tiempos.....
MOTION PICTURES, CIERRES Y APERTURAS. PLIEGUES Y REPLIEGUES
ResponderEliminarLas fotos que se mueven. Motion pictures. Si la foto captaba el instante en el tiempo y lo fijaba, la foto que se mueve, el cine, lograba captar el movimiento, el tiempo-espacio; logrando así una mayor precisión de representación de la realidad, mayor "realismo". Pero también mayor poder para las representaciones imaginativas, para la creación y recreación de las obras literarias y teatrales, para la ficción en todas sus modalidades, para la creación de archivos que iban sustituyendo el papel o las bibliotecas ahorrando espacio y dando rapidez a la información almacenada. Cosa que adquirió mayor precisión al incorporar el sonido.
El éxito del cine y la televisión los hicieron universales como medios de entretenimiento, información y educación. Los medios audiovisuales también se convirtían en importantes medios de transmisión y creación de valores y significados nuevos.
¿Dónde quedaba la "realidad" fuera de las representaciones? ¿Acaso había existido alguna realidad ahí afuera, fuera de nosotros, que ya no estuviera representada desde un primer momento por el lenguaje? ¿No es el lenguaje el primer medio de representación con que nos hacemos a nosotros mismos, o por medio del cual se abre en nosotros el mundo en todas sus facetas significativas o valorativas? ¿No es ya el pensamiento lenguaje en diálogo e intercambio con los otros y diálogo consigo mismo desde dentro de nosotros y la base de toda identidad del yo que se va formando desde la misma infancia?
Y si el lenguaje ya es el mundo dentro de nosotros en forma de representación y pliegue y repliegue de nuestras interioridades anímicas y psíquicas; o forma de expresar nuestros deseos o forma de producir o reconducir nuestros deseos al mismo tiempo y en la dirección deseada, entonces ¿qué mundo o potencial se estaba produciendo primero con la imprenta, luego con la fotografía y más tarde con el cine y la televisión? Nuestros sentidos se estaban potenciando a la par que nuestro dominio de la naturaleza se hacía cada vez más instrumental a nuestro servicio en forma de progreso, de intercambio, de significados cada vez más comunes. Si el planeta ya era una red intercomunicable a partir del siglo XX, también lo eran las técnicas de representación al servicio de la producción de espejismos con sus efectos, de ilusiones con sus afectos y efectos, de paraisos, de formas de autorepresentarse, de activación, desactivación y desplazamiento de ideologías y religiones, de posibles libertades y derechos en nombre del individuo o del Estado como aparato instrumental de dominio y soberanía o de ambas cosas en confusión.
CÓRPULO Y NÍTIDA FERNÁNDEZ DEBATEN SOBRE LOS APUNTES DE ARRIBA
ResponderEliminarCÓRPULO.- He estado leyendo esos apuntes tuyos sobre las representaciones especulares, la fotografía, el cine, etc. Seguro que te falta ahora Internet, pues con Internet los archivos y la información y la instantáneidad es global.
NÍTIDA FERNÁNDEZ.- Sí, me iba a meter con Internet y decir cómo todo lo anterior se amplifica de modo superlativo con Internet, las redes, las nubes, el 4G, etc. ¿Cómo englobar todo ésto con una metafísica que le dé un sentido? Porque al final siempre recurrimos a una metafísica que le dé sentido y así empaquetamos otra ideología al servicio de gente que además puede vender. Siempre aparece un profeta que pretende tener la explicación y dar sentido. Hegel con el Espíritu Absoluto, Marx con la lucha de clases y el comunismo, el mundo como ente vivo, Dios como justiciero final de la historia y la Jerusalén celestial...
CÓRPULO.- Has dado en el clavo. Luego están las explicaciones futuristas de la ciencia con un universo en expansión-contracción o expansión infinita. Enfín, algo donde el hombre no cuenta nada y donde a distancias cósmicas no significa nada. Me deja enteramente indiferente que el universo se expanda o se contraiga o que el sol nos queme y nos desintegre como planeta dentro de 5000 millones de años. Lo que nos interesa a todos es la existencia diaria, la supervivencia más justa posible. Pero si hay una consecuencia directa de esta época globalizadora es la desaparición de la Realidad, como tú bien dices, para convertirse en múltiples realidades subjetivas, tantas realidades o representaciones como individuos hay en la tierra...
NÍTIDA FERNÁNDEZ.- ¡Hum!, qué quieres decir...
CÓRPULO.- Quiero decir que ya no hay manera de imponer una realidad o discurso o representación oficial basada en la fe revelada o una demostración indubitable bien sea de Razón o de Intuición o Inspiración. El mismo método de la razón y la ciencia empírica nos llevó al cuestionamiento de todo, de tal manera que ya cualquier Realidad queda disuelta en energía espacio-tiempo y sus misterios explicados de forma matemática hasta dónde sea posible. Lo cual nos deja indiferentes y ya libres de jugar con cualquier explicación metafísica o cualquier discurso, o cualquier cuento chino llegado el caso. Cuando ya deja de existir una Razón o Dios o los dioses o un Ser Supremo autosubsistente, entonces ya nada tiene más sentido que el que nosotros queramos darle. Las leyes físicas existen, pero yo soy libre de darles una interpretación particular, la moral sigue existiendo, pero yo soy libre de jugar con ella y utilizarla a conveniencia y por supervivencia. La religión ya no me puede forzar a creer como antes, por tanto soy libre de creer lo que me parezca o inventarme mi propia religión o filosofía de la vida o secta política y religiosa o lo que sea. Mientras cumpla las leyes y nadie utilice fuerza contra mí, soy libre para todo.
NÍTIDA FERNÁNDEZ.- Suenas a Dostoevski....
NÍTIDA Y CÓRPULO SIGUEN DEBATIENDO O DIALOGANDO
ResponderEliminarNÍTIDA FERNÁNDEZ.- Pensando en lo que decías ayer parece ser que el mundo ha explosionado las representaciones de Realidad que lo sustentaba, Realidades oficiales basadas en una metafísica incuestionable que sometía cuerpos y almas de un modo jerárquico y autoritario. Ante la mínima duda o desobediencia te cortaban el cuello o te metían en una mazmorra a pudrir. El poder final era la posibilidad de hacerte desaparecer sin más.
CÓRPULO: Todo eso ha explosionado y se ha fragmentado en múltiples discursos que viven la imposibilidad de llegar a ser discursos representativos de ninguna realidad última. Hoy día no hay posibilidad de demostrar definitivamente ninguna verdad en ningún campo del saber. Ninguno en la política. Los hay que quieren resucitar la Patria como ente trascendental, o la lucha de clases como clave suprema de la historia, o a Dios como Ser absoluto que rige el universo; pero para ello se requiere un milagro, y hoy día los milagros han desaparecido. Podrán sustentar un como sí por un tiempo y usar el poder como sí, matar incluso a mucha gente porque sí; pero sin poder convencer de ninguna razón última que no sea la puramente convencional e interesada.
NÍTIDA FERNÁNDEZ.- O sea, quieres decir la violencia sigue rigiendo el orden político, sigue sustentando las leyes de un país, la moral sigue funcionando pero sin más fuerte convicción que la que podamos o queramos darle o por razones internas de pasión o de dominio o amor a la libertad como valor. El concepto de soberanía popular en que se basa la democracia moderna es un vínculo de conveniencia histórica, pero sin valor alguno metafísico en el que se pueda depositar fe. Pero yo diría que te olvidas de algo importante: hay personas o individuos que siguen albergando convicciones profundas que no se pueden explicar como condicionantes ideológicos o por conveniencia.
CÓRPULO.- Cierto, yo ya he dejado de buscar explicaciones globales, o al menos lo intento. No encuentro explicación alguna del porqué las personas son como son. Me miro a mí mismo y veo un sin fin de complejidades, ambivalencias, contradicciones, pero sin embargo hay una resonancia fundamental que determina o rige en última instancia mi modo de vivir el mundo. Esa resonancia es importantísima para mantener un equilibrio a pesar de las dificultades de la vida, fundamental para no volverse loco o llegar a ser un malvado en toda regla. No sé explicar ni me parece que jamás nadie llegará a explicar nada en cuanto a lo que rige la vida de las personas. Hay gente perversa y hay gente buena, hay gente abierta a los demás y a la vida en general y hay otras que se cierran, que desconfían profundamente de todo. Pero lo dicho, es imposible saber el porqué la gente llega a ser lo que es. Ninguna ingeniería social lo logra explicar. Se juega mucho con explicaciones de ambiente o entorno, pero no convence; nadie sabe cual es el secreto profundo de una persona.
NÍTIDA FERNÁNDEZ.- Es interesante lo que dices. Las representaciones globales de Internet nos permiten visibilizar infinitas perspectivas, paradigmas diversos, particularidades increíbles pero posibles, moralidades de todo tipo y color, violencias insidiosas y sádicas, experiencias espirituales de todo espectro, ocultismos, ideologías sin número, expresiones artísticas a la carta, fanatismos diversos; conocimientos de todo tipo de forma instantánea, comunidades alternativas, filosofías sensatas e increibles....transaciones de toda clase, empresas inovadoras, mercados negros, etc, etc. Si logras no traspasar la ley, puedes ser lo que te dé la gana y lo que el cuepo y alma te pida. El secreto está en esa alma, en esa resonancia que tú dices.
PEPE Y XUACU Y EL 2+2=4
ResponderEliminarPodría ser que cuando dices algo quien te escucha lo entiende siempre en función de su experiencia. Podríamos ver las mismas cosas o usar las mismas ideas, pero esas mismas cosas o ideas cambiarían de atmósfera, estarían en otro mundo particular que englobaría así mismo una realidad también particular en sus tintes emocionales, afectivos, perceptivos.
Entonces ocurriría que cuando dices algo y alguien te oye, ese algo no sería algo neutro fuera de toda realidad particular, siempre sería ya algo para mí o para el otro. Una vez dicho ese algo ya no seríamos dueños de lo dicho, pues pasaría a ser público, y en oídos del otro o los otros que te escuchan pasaría a ser interpretable de acuerdo a experiencias particulares. No habría entonces comunicación directa entre A y B con un mensaje C que es neutro e igual para todos. Esa idea de comunicación pura entre sujetos que comparten información no sería más que una abstracción teórica, pero no aplicable a una realidad de complejidad humana.
Pero si 2+2=4 es igual para todo el mundo, al margen de cual sea la subjetividad de cada uno, eso implicaría que la verdad 2+2=4 es una verdad absoluta que todo el mundo ha de aceptar y subordinarse a ella.
"Eh, Pepe, aquí hay cuatro barras de pan."
"Sí Xuacu, son cuatro barres de pan."
"Bueno, pues cómproteles",
"Val, son tres pesetes, pues llevales."
Una vez Xuacu lleva el pan puede comerlo él solo o repartirlo o tirarlo o darlo a los cerdos o a un centro de caridad. El 2+2=4 es un elemento objetivo de intercambio, pero no condiciona la experiencia de Xuacu para nada, ni tampoco la de Pepe. Pepe puede ser un panadero honrado o un borrachín con una panadería en ruinas, etc. Si el 2+2=4 nos condicionara la mente a una conducta racional en todas las dimensiones éticas, psicológicas, emocionales, entonces podríamos hablar del 2+2=4 como una abstracción determinante de nuestra existencia. Pero el efecto de dicha identidad matemática solo es instrumental, de intercambio ocasional. Saliendo de esa relación ya no tiene más que decir en la vida normal de Pepe y Xuacu.
Pero hoy día el 2+2=4 es todo un paradigma matemático que explica no solo las leyes de la física más compleja, sino también todos los ámbitos de la vida moderna midiendo su estabilidad o inestabilidad tanto en medicina como en economía, como en sociología, neurología, educación, y cada vez intenta apropiarse de campos humanos en todas direcciones. Incluso la filosofía aspira a ser una ciencia exacta. Todos recurrimos a un experto o expertos en la materia que son la última voz en cualquier tema: nutrición, conductas diversas y en base a estadísticas o indicadores objetivos, etc.
En definitiva, las vidas de Pepe y Xuacu antes y después del 2+2=4 siguen ya estando también bajo parámetros sociológicos, psicológicos, éticos, morales, condicionantes socioeconómicos y todo ello bajo el paradigma matemático que domina nuestro mundo o pretende dominar.
LA LECTURA DEL ROLLO
ResponderEliminarEl anciano fue a la Palabra. Abrió el rollo y leyó para sí. "Leer para sí", pensó, "yo leo y yo escucho y yo interpreto." Y en el momento que comenzó a leer, las palabras se iban deshaciendo en letras. Las frases se iban fragmentando en letras sin sentido. Perdían el orden sintáctico y se mezclaban unas con otras.
Creía volverse loco. Dejó el rollo de la Palabra sobre la mesa tosca de madera de roble. Todo le daba vueltas. Se había vuelto un torbellino, una vorágine de letras endiabladas. El caos primordial. El sinsentido primordial dentro y fuera de sí. El mismo cuarto de la vieja mansión fue perdiendo forma y todas las cosas se trastocaban y se mezclaban. Y la luz se fragmentó en mil espectros calidoscópicos que se confundían con el fuego de la chimenea. No había un yo, Emmanuel Alkana, como centro de orden y sentido, sino letras y objetos que se desintegraban y se volvían a reconstruir, para volver a desintegrase en fuego o humo o sonido o vapores.
Y entonces desde el mismo caos se fue abriendo un hueco mental de vacío y silencio absoluto. Absoluta quietud. Todo giraba alrededor de manera caprichosa y endiablada: las letras, los objetos en un proceso de formación y desintegración, las luces confusas de fuego y luz primordial en forma de espectros y centellas danzarinas. Una voz lo nombró en el vacío absoluto. Y fue él, Emmanuel Alkana, de nuevo alma viviente.
Cogió una pluma y se puso a escribir en el papiro. Fue poniendo orden a las letras y formaba palabras y las palabras las fue juntando en un orden sintáctico con un sentido que no correspondía al orden inicial de la lectura del rollo. Era otro texto: un texto de gran belleza creativa, de un intenso placer sensual al pronunciar los sonidos, de significados precisos y ordenados. De nuevo el orden. Un orden. Un universo. Era un alma viviente perteneciente a una nueva creación. El cuarto se volvió a restablecer en el orden anterior, pero todo brillaba con un fulgor divino. Sintió la bendición de D-ós en forma de perfecto sosiego. Ahora sabía que si volvía a releer el antiguo párrafo del rollo, otra posible combinación de letras podría atraer otra nueva creación, pues cada lectura implicaba una nueva interpretación y así de manera infinita. "¡Oh, Di-ós!, grande eres tú, que nos haces ser almas vivientes de tus infinitas creaciones."
Y en ese momento se dirigió a una de las ventanas, la abrió, y fue al instante el resplandor de infernales rayos y poderosos truenos junto a la fuerza de un viento huracando que se llevaba todo árbol y succionaba las aguas de la laguna cercana restallándolas contra las casas de sus vecinos. Un horror caótico se había apoderado del mundo de afuera, y él se sintió culpable. Cerró la ventana y sintió frío. Un frío primordial. Gélido y silencioso.
DE NUEVO LA NAVIDAD
ResponderEliminarNavidad. Turrón y mazapán. Hasta las viejas iglesias católicas pierden ese hálito de muerte y tristeza santurrona que cubre y recubre sus superficies y espacios. Pues en la Navidad parece que todo se rodea de inocencia, de paisajes lejanos de infancia, de almas alegres que cantan desde el más allá. Todo en torno al nacimiento del Mesías. Un mesías es una esperanza de gobierno justo. De triunfo sobre la Historia convertida en pesadilla para muchos. De nuevos cielos y nueva tierra si hemos de ver al Mesías en términos judíos. Triunfo sobre la muerte cuando los cuerpos o almas vivientes se recompongan en la resurrección final.
Pero en la Navidad no pensamos en la maldad o en el castigo eterno de nadie. Pensamos en la inocencia que hemos vivido en algún momento de nuestras vidas, y que jamás ha muerto. Está ahí en todo el mundo, más o menos olvidada, pero que en Navidad surge con cierto destello o anhelo imposible de definir o delimitar o subordinar. Oímos ecos de algo que habita o existe en algún sitio inexplicable.
Nieve. Frío. Hogar en una casa solitaria llena de niños que juegan y mayores calentándose bajo el fuego de la chimenea y esperando un Santa Claus o Papá Noel que llegará en cualquier momento. Ya todos han cenado y algunos cantan villancicos nostálgicos que apelan a un lugar sagrado frío y nevado, pero bajo un fuego donde se calienta una familia con un niño recién nacido. Quizás un bosque profundo y una cabaña. O un valle helado y una pequeña casa con chimenea. El frío y la nieve de la soledad, del universo que nos rodea, de la muerte como final. Pero el fuego de la vida, de la esperanza, de la resurrección. Posibilidades del cuerpo: muerte o resurrección.
Por eso apelamos al fuego de la Navidad con sus imágenes de esperanza.
RESONANCIAS Y COMUNIDADES
ResponderEliminarCuando alguien da la razón a otra persona es que ya hay una relación afectiva previa con un tema común. Alguien. Imposible meterse en la cabeza de alguien. Yo: imposible encontrame a mí mismo. Mi mismo. ¿Qué es eso? Me excede. Mejor diría: excede. Regresión infinita a la hora de situarse en un yo. No hay un yo que sea sí mismo. Hay muchos yoes provisionales, ocasionales para cada momento y circunstancia. Nada pervive en la conciencia de forma fija. Estamos sometidos al cambio y al tiempo. Somos cambio y tiempo, por tanto no puede haber un yo fijo y permanente.
Alguien es otro ahí afuera que me interpela con su rostro y sus palabras y sus gestos. Pero si habla de algo que me pueda producir una resonancia o vibración especial, entonces él/ella y yo compartimos un algo común que nos ha atraido a los dos.
"¿Te acuerdas de aquel día en aquel pueblo cuando coíncidimos en aquel trabajo y pasó esto y lo otro?"
"Sí, me acuerdo. Y aquel día en que todos fuímos a cenar a tal sitio y alguien se puso a tocar la guitarra y lo pasamos muy bien."
"Qué bien lo pasamos. Estábamos todos en una buena onda...."
O también pudo haber sido un accidente triste compartido de forma parecida. O un encuentro amoroso de fuerza inusual. O una forma de describir uno su trabajo y su involucración emocional y entonces nos sentimos atraidos por esa experiencia que pasa a vivirse de forma común. O una excursión recordada. O una familia en el pasado vivida por dos hermanos y ahora recordada con fuerte resonancia, con esa fuerza de acontecimiento que parece convertirse en arquetipo.
Cuando hay esas coincidencias emocionales o afectivas de resonancia con otra persona, entonces se ha abierto una comunidad. En relación con ese acontecimiento.
Recréate en el acontecimiento y aspira las lejanías, las nubes, los colores, las vibraciones de ese acontecimiento que se ha vuelto arquetipo. Es algo que forma parte de tú universo y del otro. ¿En qué grado de intensidad? Quizás para tí sea intenso siempre que se rememora, pero quizás para el otro haya disminuido la intensidad, o quizás los dos estáis en el mismo grado de intensidad afectiva y rememorarlo es descubrir un horizonte de comunidad.
Las resonancias suelen ocurrir en uno mismo. Y si es así es que hay paisajes o acontecimientos que te están señalando caminos que te quieren llevar a un sí mismo que jamás has de llegar.
MORALISMO Y AUTENTICIDAD
ResponderEliminarLas resonancias son las fuerzas anímicas que nos hacen sobrevivir con autenticidad. Apelar al yo para hacer cambiar es perder el tiempo. No hay yo fijo y transparente desde el cual actuar con propiedad. Los moralistas apelan a ese yo que debe de ser bueno, mejor, más puro, más cristiano, mmejor socialista, más feminista pura, un buen ecologista, más racional, más imaginativo. Procuraré ser más imaginativo, mejor cristiano, mejor musulmán; mañana seré más racional, etc. Y moralistas los hay a millones y hablan sin parar desde muchos sitios y se creen autoridad.
Pero es imposible cambiar nada apelando a un yo, quizás sea peor, pues al no existir un yo transparente consigo mismo no se puede hacer nada efectivo desde una nube de humo. Sólo se podría actuar efectivamente si hubiera una energía anímica lo suficientemente fuerte que nos situase en arquetipo profundo que nos empujaría a ser eso que sería irresistible. Irresistible. Una afectividad potente que buscaría su racionalidad para abrirse paso y con visión propia de mundo y universo y vida multidimensional. Lo prosaico seguiría siendo prosaico, pero absorbido bajo una fuerza psíquica irresistible que navegaría en una dirección...
Lo irresistible nos llevaría a la autenticidad. Y la autenticidad podría ser compartida y reconocida en las resonancias ante acontecimientos comunes. Muy lejos de cualquier moralismo.
NO SÓLO DE POLÍTICA VIVE EL HOMBRE
ResponderEliminarLa gente espera mucho de la conciencia política para cambiar el mundo, pero la conciencia política no alcanza a reconocer el malestar existencial que subyace bajo nuestra aparente normalidad. Lo político es siempre instrumental para cambiar situaciones. Comprendemos las relaciones de fuerza y poder y tratamos de resistirlas en favor de una mayor libertad y dignidad para todo el mundo. Pero en política no todo va en línea recta y sí mucho en líneas torcidas y curbas y avances y regresiones, despliegues y repliegues, fricciones y zancadillas. Ante la frustración de la actividad social y política, que siempre surge en algún momento, el alma debería de notar con fuerza otros espacios y otras esperanzas que la protegieran del desengaño, los golpes bajos, la insidia y mendacidad de mucho juego político. Un espacio anímico más allá de cualquier yo pasajero enraizado en espejismos y falsos fundamentos. La Biblia habla del Espíritu Santo.
NO SÓLO DE POLÍTICA VIVE EL HOMBRE
ResponderEliminarLa gente espera mucho de la conciencia política para cambiar el mundo, pero la conciencia política no alcanza a reconocer el malestar existencial que subyace bajo nuestra aparente normalidad. Lo político es siempre instrumental para cambiar situaciones. Comprendemos las relaciones de fuerza y poder y tratamos de resistirlas en favor de una mayor libertad y dignidad para todo el mundo. Pero en política no todo va en línea recta y sí mucho en líneas torcidas y curbas y avances y regresiones, despliegues y repliegues, fricciones y zancadillas. Ante la frustración de la actividad social y política, que siempre surge en algún momento, el alma debería de notar con fuerza otros espacios y otras esperanzas que la protegieran del desengaño, los golpes bajos, la insidia y mendacidad de mucho juego político. Un espacio anímico más allá de cualquier yo pasajero enraizado en espejismos y fundamentos de humo. La Biblia habla del Espíritu Santo.
En París pasando las Navidades. Feliz Navidad a todos mis lectores y lectoras.
ResponderEliminarREFLEXIONES AL VOLEO
ResponderEliminarLas verdades de razón obedecen a un método que requiere la demostración y la evidencia para todos aquellos que buscan la verdad. Si falla la demostración y la evidencia entonces ya no se trata de verdad de razón, sino de cualquier otra interpretación que ha de responder a los caprichos de la imaginación, las necesidades afectivas o emocionales de la gente, al miedo, etc. O sea, la única verdad para todo el mundo obedece a la razón y su método, lo demás es quizás importante, pero subjetivo, variable, sometido a intereses particulares, impuesto o libremente aceptado, pero no obligatorio salvo que te obliguen a ello. Esta es la perspectiva de Juan Arias, el autor de este artículo. Y es la perspectiva de muchísima gente hoy día. ¿Qué hacer ante esto? ¿Cerrarse en banda y no entrar en el debate?
(VIENE DE ARRIBA)
ResponderEliminarPero la fe ¿obedece entonces a los mismos criterios que la razón? De ser así la fe está perdida. Los evangelios no serían verdad universal hasta el momento en que se pudieran demostrar con evidencia racional y objetiva todos los acontecimientos que describe, los milagros, las fechas históricas; hasta disolver las aparentes contradicciones o silencios que se presentan. Incluso las fechas en que se escribieron y a quién y el porqué se escribieron. Todo esto habría que demostrarlo con evidencias claras y objetivas para todo el mundo. Pero no es así, y entonces sólo podrían ser considerados como obras literarias y nada más. Es evidente que los evangelios no se pueden demostrar de la misma forma que se demuestran las leyes de la física o la conquista de América. ¿Y entonces?
(VIENE DE ARRIBA)
ResponderEliminarPues si la razón tiene la última palabra en todo, queda muchísimo en nuestras vidas que jamás tendrá explicación, pero sin embargo seguimos viviendo en las experiencias diarias para bien y para mal. Las experiencias diarias de la vida, los conflictos, las alegrías, las victorias y las derrotas, los placeres del espíritu y sus infiernos, las ilusiones, la luz de la imaginación, la profundidad o superficialidad del alma individual o colectiva, nada de eso parece responder a los métodos y dictados de la razón. Más bien parece que la vida es una confluencia de infinitos factores, de infinitos intercambios en todos los niveles, de sentimientos que fluyen o dejan de fluir, de tropiezos , caidas y vuelta a levantarse; de placeres estéticos ante el arte y la naturaleza, etc, etc...Sufrimiento, placer, equilibrio... Poca gente vive con una regla de cálculo midiendo sus experiencias hasta comprenderlas de forma exacta y objetiva para todo el mundo.
(vIENE DE ARRIBA)
ResponderEliminarPero todo el mundo aspira a vivir con sentido, con significado, con una orientación, con unos valores. Eso es una evidencia. No vivimos en un vacío de sentido. No podemos vivir de tal manera. Hasta el más nihilista encuentra sentido en su nihilismo. El Señor Arias, autor del artículo, parece decir que él vive en la realidad que la razón le permite. Ante la verdad histórica demostrable, él escoje la demostrable hasta donde sea posible. Vale. Nada que decir. Yo mismo si estoy haciendo investigación histórica bajo un método racional y válido haría lo mismo. Lo que no puedo hacer es hacer ciencia falseándola con la fe. No puedo hacer ciencia saltándome su método. Seré un creyente cristiano en lo más profundo de mí, pero si estoy haciendo ciencia o usando lógica racional, no puedo anteponer mi fe a ese método o lógica. Simplemente estaría haciendo trampas. Todo lo que demuestre ha de ser con demostraciones o evidencias. No hay otra. Otra cosa es mi fe y en qué está basada mi fe, y cómo vivo mi fe y qué sentido me da la fe. Pero ahí ya entramos en la dimensión de la fe. Y no todo el mundo es capaz de vivir tal fe y menos comprenderla.
(vIENE DE ARRIBA)
ResponderEliminarEl catolicismo no pudo sostenerse en la fe per se porque entonces el mundo pagano de las clases altas la rechazarían por absurda. La resurrección sería algo absurdo. Los milagros. La misma figura de Cristo. Era necesario integrar la razón a la fe para poder servirla con más seriedad, con más propiedad. habría que explicar la revelación como un anticipo de lo que luego nos revelaría la razón. Dios también se atiene a la Razón en última instancia. A la razón o logos griego, evidentemente. E incluso Dios es razón que en último término hasta el intelecto de los hombres podrán llegar a conocer. Dos vías: la fe y la razón. Y si la razón es capaz de comprender y ver y distinguir el bien del mal, entonces el hombre está capacitado para salvarse por vías naturales también. Y si falla y no cumple las vías racionales morales o éticas tal como marca la Iglesia, pues entonces entra la fe y se rellena el asunto. Y no pueden contradecirse. Pero la pregunta es: ¿Es ese el Dios de la Biblia? ¿No es el Dios de la Biblia un Dios de libre y absoluta Voluntad? ¿No está el Dios de la Biblia más allá de todo bien y todo mal y no es su Voluntad libre y absoluta quién decide lo que es bueno y es malo y lo que es "racional" o "irracional" en cualquier circunstancia o momento? ¿No es aquel que puede hacer hijos de Abraham desde las mismas piedras y en cualquier momento? Este Dios no está sometido a ninguna ley racional eterna y necesaria al modo griego, pues creó al mundo de la nada. Casi nada. Bueno, lo dejo ahí.
MÁS NOTAS
ResponderEliminar.Hay que matizar qué entendemos por razón. Todos los humanos tenemos la facultad de razonar, pensar, sacar conclusiones en función de causa-efecto, experiencias, contar, racionalizar leyes, conductas, etc. Es una facultad natural (que nos viene dada). Otra cosa es cómo se entiende esa facultad de razonar dentro de un orden universal. Para los griegos esta facultad natural se eleva a una realidad metafísica que fundamenta el universo, y constituye su ser. Por decirlo de una manera más fácil; la Razón deja de ser una facultad instrumental en el humano y se diviniza (de un modo impersonal). La razón entonces es eterna y todo lo existente está subordinado a ella. Por eso la búsqueda de la verdad solo se puede hacer con el correcto uso de la razón, desechando todo aquello que la oscurezca o la confunda: los sentidos, las pasiones y afectos, los sentimientos particulares, la materia, etc. De ahí la lógica y la dialéctica socrática.
(VIENE DE ARRIBA)
ResponderEliminarResumiendo: la razón griega es una realidad trascendente, eterna, universal que somete todo a su poder y verdad. Dioses y humanos están sometidos a sus leyes que son inexorables, inmutables, trasparentes en sí mismas. Que no lleguemos a vivir en esa adecuación con la Razón se debe a que estamos en un mundo de apariencias, de ilusión, de poder material en forma de experiencia incompleta, defectuosa, deformante, etc. La vía de la razón incluye un método correcto de lógica, o dialéctica que son las herramientas que nos llevan a la Verdad transparente y eterna.
(VIENE DE ARRIBA)
ResponderEliminarAhora bien. ¿Cómo entiende la Biblia la facultada de la razón? Efectivamente, la Biblia no renuncia a la facultad de raciocinio, Los hombres piensan, reflexionan, cuentan, calculan, hacen proyectos, intercambian, etc. Pero la razón es una facultad más entre otras varias del alma humana. No es una entidad metafísica que trasciende toda manifestación visible y material en este mundo, como hacen los griegos. Para los personajes de la Biblia la razón es instrumento de la fe, está subordinada a la fe. Cuando la razón deja de estar subordinada a la fe entonces tenemos un problema. O mejor, cuando la razón adquiere independencia propia y comienza a funcionar para fines particulares, para obras dedicadas a otros dioses (idolatría), para fines que no corresponden a la Voluntad Divina, entonces comienza a haber problemas. Por eso en el AT vemos cosas que a nosotros nos parecen fuera de toda lógica, o incluso amorales, crueles o absurdas, pero que bajo el prisma de la voluntad de Jehová son correctas. Y entonces aquí está el quid de la diferencia entre Jerusalén y Atenas. Para el mundo bíblico solo hay una verdad trascendente a toda creación: la Voluntad de Jehová Dios.
(VIENE DE ARRIBA)
ResponderEliminarEn una palabra: no hay más razón que la Voluntad de Dios, o dicho de otra manera: la Voluntad de Dios es su razón de ser y existir al mismo tiempo y sin separación alguna. ¡Buff! Y eso quiere decir que Dios hace lo que quiere y cuando quiere y todo lo que hace no responde a ninguna razón universal común a Dios y a los hombres. Dios no está sometido a ninguna Razón o razón que lo trascienda y lo juzgue. Lo que existe existe porque sí, porque su Voluntad se mueve sin atenerse a código alguno que Él se vea obligado a cumplir por ser superior a Él. Él hace lo que hace porque sí. Su obra de creación es como un permanente milagro que Él mantiene en su Voluntad. El mundo surge de la nada, de lo inexistente porque sí. No hay necesidad interna a Dios que lo mida, le exija o lo juzgue. No hay esa dicotomía. La razón griega no tiene nada que hacer con este Dios bíblico.
(VIENE DE ARRIBA)
ResponderEliminarDios ordena a Abraham salir de su tierra y Abrahma solo tiene que confiar. Dios prepara una ley para los hombres sustentada en su Voluntad, no en una Razón universal. Dios puede castigar, pero también sabe arrepentirse sin dejar de ser Voluntad perfecta, pues Dios está más allá del Bien y el Mal. El Bien en el pensamiento griego es una categoría eterna que es coesencial a la Razón, pero no así en la Biblia. El Bien en la Biblia es consustancial a su Voluntad. El bien es bien porque coincide con su voluntad libre y arbitraria, no al revés. O sea, el Bien no es Bien antes de ser Voluntad de Dios.
Lo dejo ahí por ahora.